Saludos amigos de hive, hoy les quiero compartir nuestra salida del fin de semana pasado, la verdad no teníamos nada previsto solo salimos a comprar un termo de agua para mi hija que pronto comienza clases y necesita uno nuevo, así que el plan era solo eso, pero para nosotras es imposible cumplir un plan al pie de la letra, así que nos desviamos un poco, fuimos a una Feria de Libros, mi hija siempre está atenta a compras libros nuevos, así que nos dispusimos a disfrutar un poco de este plan. La feria estaba expuesta en el Hotel Nutibara es un hotel ubicado en la ciudad de Medellín, en el centro, un lugar repletos de sitios turísticos tales como el Museo de Antioquia, el Palacio de la Cultura, los parques de Berrío y Bolívar, la catedral metropolitana y la basílica de la Candelaria, algo peculiar de este hotel es que su nombre deriva de un cacique que habitó la región, NUTIBARA y el nombre de seis de los salones del hotel están relacionados con pueblo amerindio como: Bochica, Tayrona, Quimbaya, Katío, Bachué y Nutabe, asi que fue bastante interesante entrar ver un poco de las instalaciones del hotel y dirigirnos hacia la feria de libro, asi que hasta este punto todo estaba bastante placentero.

El espacio era un salón bastante grande y la oferta literaria era extensa, desde filosofía, literatura hispana, filosofía, sociología, guías de salud, matemáticas, física, química, novelas, y grandes propuestas de comics, así que mi hija se encargó de ver mesa por mesa, tomándose todo el tiempo del mundo, y ahí todo empezó a tornarse diferente, no me gustan los espacios cerrados, aunque el lugar no estaba tan lleno, pero había un calor insoportable, y la verdad yo suelo comprar en lugares así, me canso rápido de las partes cerradas, ella había escogido varios libros para comprar, pero yo sentí que pasaron mil horas, nos dispusimos a pagar y la cola era inmensa, la verdad que hay momento que sufro de ansiedad y este fue uno de estos, mi hija decidió no comprar nada había muchas personas pagando, así que solo dejo los libros y nos fuimos, fue una compra fallida, realmente me apena por ella, sé que disfruta comprar sus libros, pero le prometí ir a otro lugar luego para que pueda escoger lo que desee y que el lugar no esté tan encerrado, a veces los planes no son lo que pensamos, me atrevo a de decir que los planes jamás son como deseamos.

Y así término nuestra vista a la feria de libros, con una compra fallida, y las manos vacía, pero siempre hay cosas que rescatar de eventos así y de salidas así, siempre aprendo de todo lo que hago, esta vez fue fallida, pero la próxima buscaré un lugar más acorde para mis expectativas, y trataré de tomarme las cosas con mayor tolerancia, dejar que mi hija tome su tiempo para disfrutar su compra porque sé que ella le encanta comprar sus libros, algo que me gusto mucho fue en la salida había una pared con algunos cuadros con personajes que a mí me encantan así que pude capturarlos, no todo fue tan ansioso, gracias por llegar a este punto de la lectura, gracias por el apoyo