Mi Sol en la Exhibición de Karate-Do del 55 aniversario del Parque Peñalver

El Parque Peñalver, en cuyas instalaciones hace vida el Dojo de Karate-Do al que asiste mi hijo, está de aniversario, 55 años albergando a un gran numero de atletas y aficionados al deporte que le dan vida a este generoso y humilde lugar.

Cada una de las academias que día a día enseñan sus especialidades, prepararon una exhibición al público asistente a esta celebración. El pequeño gimnasio cubierto, estuvo dispuesto para nosotros en horas de la mañana, donde los chicos y chicas que practican Karate-Do tuvieron la oportunidad de mostrar cuanto han aprendido.

Iniciaron con un kata en el que participó el grupo completo.

Kata grupal

Luego hicieron kata individual, sin embargo, mi hijo y dos compañeros hicieron una muestra de kata en equipo. Realmente les quedó muy bonito, creo que este deporte es elegante.

Kata en equipo

No sé nada de técnicas, pero los veía bien sincronizados, así que supongo que lo hicieron bien.

Kata en equipo

Su Sensei también hizo una demostración de un kata de nivel avanzado. Es un chico de 16 años quien tiene la gran responsabilidad de enseñar a estos niños todo lo que implica esta disciplina y cabe destacar que tiene mucho talento y carácter.

El Sensei en su kata individual

Realmente disfruto cada vez que el Sensei Luciano aparece en escena, mostrándonos a dónde se dirigen nuestros hijos si siguen este camino, además me tranquiliza saber que tiene el nivel y la condición humana necesaria para guiarlos.

El Sensei en su kata individual

Luego hubo combate cuerpo a cuerpo o kumite. Me gusta porque en este estilo a ellos sólo se les permite marcar el golpe, sin realmente darlo, si alguien por error o con intención golpea al otro, entonces pierde puntos, en lugar de ganarlos.

Mi hijo en medio de un combate o kumite

Fue una mañana bastante emocionante, en la que, como padres, nos sentimos complacidos de que nuestro hijo esté en este lugar, aprendiendo tantas cosas que le nutren como persona, además de fortalecerse física y mentalmente.

Al finalizar la exhibición, compartimos una comida, que organizamos los padres y que la mamá de un compañerito de mi hijo, tuvo la amabilidad de preparar. Le llamamos arroz con todo, porque fue un arroz guisado con todos los ingredientes que recolectamos.

Al final todo salió bien, gracias a Dios, dejándonos una experiencia grata y la dicha de haber estado presentes, una vez más, en una actividad importante para el crecimiento integral de nuestro hijo.

La vida desde el agradecimiento, es una vida llena de bendiciones.

Gracias a todos ustedes por tanto...

_{La fotografía mostrada es de mi propiedad y usé la aplicación ToonMe para decorarla.
Emojis hechos con Bitmoji.
Separador elaborado en PowerPoint a partir de la imagen de portada.}