Después de una intensa tarde de estudio, me dirigí a las barras para desconectar y entrenar. A pesar de la jornada, mis músculos estaban ansiosos por moverse. Comencé con un calentamiento dinámico en pino, un ejercicio que me permite activar los músculos estabilizadores y mejorar mi movilidad en los hombros. Una vez preparado, decidí trabajar en fuerza explosiva y resistencia. Para ello, realicé un circuito combinando dominadas explosivas con agarre cerrado y fondos. Este circuito me permite desarrollar tanto la fuerza de tracción como la de empuje. Realicé 10 rondas de 8 dominadas y 15 fondos, buscando mantener un ritmo constante y explosivo en cada repetición. Para trabajar diferentes ángulos y musculatura, incluí otro circuito en mi entrenamiento. Este circuito combinó dominadas cerradas con flexiones en diamante. Las dominadas cerradas enfatizan el trabajo del dorsal ancho y los bíceps, mientras que las flexiones en diamante ponen a prueba el tríceps y el pecho. Realicé 6 repeticiones de dominadas cerradas seguidas de 15 flexiones en diamante, y repetí este circuito varias veces. Para finalizar, incorporé ejercicios compuestos que combinan fuerza y movilidad. Realicé tuck pull-ups, un ejercicio excelente para desarrollar la fuerza en la parte superior del cuerpo y mejorar la técnica de las dominadas. Complementé este ejercicio con flexiones inclinadas, que permiten trabajar el pecho desde un ángulo diferente y fortalecer los hombros. Concluí mi entrenamiento con ejercicios básicos de abdominales en barra, como leg raises y knee raises, para fortalecer el core.