¡Si Hay Café! No Importa El Lugar. No creo que en el mundo haya un sitio que no conozca el café, o no lo proporcione de alguna manera. Podemos ir al lugar más escondido donde esté solo una pequeña casa y allí, estoy seguro que habrá una abuelita o una señora que disfrute de esta exitante bebida representada por el café. Desde mi punto de vista, no importa el sitio, lo que importa es sentir recorrer por nuestro cuerpo cada gota de café, la cual nos da esa vitalidad y energía que hace falta para iniciar el día, para compartir una tarde o sencillamente para saborearlo rodeado de familia; pero también lo podemos disfrutar estando solos y eso hace que nos encontremos con nosotros mismos.

Para mí la idea de tomar café es toda una tradición, no podemos despertar y salir de casa sin tomar café y cuando esto sucede, sencillamente busco un sitio donde comprarlo y tomarlo. Un día sin café, es un día lleno de malestar y dolor de cabeza; amigos míos, hay que tomar café para que el motor arranque, jejejeje. Para mí esto representa energía, mucho poder para afrontar el día, es una pasión interna que jamás acabará, porque mi café es la fuente perfecta para acabar con el estrés y hoy precisamente, la intención era sentirme bien sin importar el lugar.

Simplemente, estuve de compras relacionadas a la salud de mi papá, una situación que tenemos en casa muy delicada y debemos estar lo más entero posible ante la ocurrencia de cualquier eventualidad. Así que estando en el centro de Cumaná, dónde existen muchas cafeterías, me dirigí a una de ellas sin pensarlo mucho y tomar mi café el cualquiera de sus versiones. Como dije no lo pensé mucho y solicité un café negro bien fuerte, necesitaba recargar energías urgentemente porque justamente el día así lo requería.

Esperé un momento y luego, tener este café en mi mesa, representaba la gloria. De verdad que el café se veía bien negro, recio, definitivamente iba a darme esa fuerza que necesitaba; además, estaba bien caliente como a mi me gusta y por muchas recomendaciones que he tenido, casi no le coloco azúcar al café, poco a poco la he dejado y pronto tomaré todos mis cafés sin azúcar; dicen por allí que el azucar es el asesino silencioso, cuidado mi gente. Bueno, lo cierto es que disfruté un mundo mi café, lo tomé sorbo a sorbo y me comí las galletas que regalan con el café; felizmente les digo, que mi cuerpo tenía toda la vitalidad que necesitaba, yo y mi café; mi café y yo, siempre juntos sin importar el lugar; además, no puede faltar mi gorra de #liketu, así que esta es la Trilogía perfecta; mi café, @liketu y yo. Saludos a todos y nos vemos pronto.

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Fotografías tomadas desde mi dispositivo Redmi 13 pro 5g

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