Hace un tiempo estuve leyendo un comentario por redes sociales que habla de las vitaminas del amor propio, en si podemos hacer lo que más nos gusta, pero podemos establecer las nuestras si así queremos, pero en esta oportunidad les daré las que son necesarias para enfrentar con entusiasmo el amor, además para siempre estar activo y no desfallecer, nuestra vida es lo mejor y debemos cuidar ese espíritu de amor que tenemos. Una de las vitaminas necesarias es escuchar y bailar tu música preferida, aunque no lo crean hacer esto nos genera emociones que antes no habíamos sentido, también nos ayuda a drenar las energías y a renovar el alma., escuchar la música es una fuente de felicidad y por ende nos sentimos comprometidos con el baile ya que este nos impulsa a hacerlo sin detenernos, también en casa podemos observar de cerca como nuestra alma goza al igual que el cuerpo, esta primera vitamina es la que mayormente practico en casa mientras hago labores o cuando me recuesto a descansar, la música es un clic a nosotros.

Nuestra segunda vitamina es hacer una lista de agradecimientos diarios o semanales, en donde podamos agradecer todas esas cosas bonitas que nos suceden en el día, esto nos ayuda a poder materializar los sueños y dar metas propuesta a futuro, aunque no lo sepan escribir es decretar, es por los que te invito hacerlo desde la comodidad de tu hogar. Cuando agradecemos lo hacemos desde lo exterior a lo interior, aunque normalmente agradecemos a Dios y luego todos aquellos dones que nos otorgaron como: la vista, el sentido, los pies, las manos y cada espacio de nuestro cuerpo para continuar, agradecer por las cosas que nos suceden, tanto buenas como malas es sinónimo de amor propio hacia tu persona, es dar gracias por las lecciones dadas en ese momento, entonces es ahora cuando empieces agradecer todo en la vida diariamente.