"Este es el mundo al revés", una frase que mi abuela solía decir bastante. Todos estamos al revés de cierta forma, todos tenemos una noción de lo que es lo correcto, tenemos pequeños chispazos de conciencia que nos indican un espejismo de lo que es un mundo adecuado y perfecto. Sabemos lo que es el bien, la eternidad y la perfección. Uno se impresiona al ver cuando alguien envejece mucho, o cuando un niño crece bastante, porque hay algo en el fondo de nuestro ser que esta acostumbrado a vivir en una realidad lineal, una realidad eterna que no cambia. Entonces ,es por eso que, al presenciar el mal, podemos quedar horrorizados y confundidos de la misma forma. Este plano es cambiante, efímero, se transforma eternamente. Uno puede acostumbrarse a esa naturaleza y ver la belleza de la transformación, pero de cierta forma en algunos ámbitos, ese hecho nos traerá algunos sufrimientos.

Seres eternos que han viajado por dimensiones, universos, planetas, pasando por distintas formas de vida a través de reencarnaciones. Sea como sea, estamos aquí, con una hermosa vida, con sus carencias y miserias, con sus abundancias y regalos. Estamos en un planeta donde el cielo y el infierno conviven en un mismo ecosistema. El ego nos hace jugadas, nos miente, hace qué nosotros mismos nos engañemos haciéndonos creer que somos algo que jamás seremos. Creamos una realidad en soledad y nos volvemos los dioses de nuestra isla desierta.

Luego, cuando empiezas a darte cuenta de los errores del mundo, los juzgas, los condenas, entonces te crees mejor que todos, cosa que no es verdad. Todos tenemos carencias y cometemos errores, no tenemos el derecho de criticar a nadie.

Ahora, ¿que tiene que ver esto con la canción? Que lo peor de todo esto es, que pensar demasiado también te vuelve loco, te atormenta, te agobia. La canción de Cerati que hoy traigo trata un poco de la locura, como nuestra dependencia mental y emocional nos puede hacer frágiles y llenarnos de temores. Si lo piensas bien, es algo muy absurdo volverse dependiente de los demás, es una locura, sin embargo, solemos cometer ese error. Amar la locura del mundo y de nosotros mismos, abrazarlo todo, tal vez esa es la salida, la verdadera paz interior.

"This is the world upside down," a phrase my grandmother used to say quite a bit. We are all upside down in a way, we all have a notion of what is right, we have little sparks of consciousness that point us to a mirage of what is a proper and perfect world. We know what is right, eternity and perfection. One is shocked to see when someone grows very old, or when a child grows very old, because there is something in the depths of our being that is used to live in a linear reality, an eternal reality that does not change. So that is why, when we witness evil, we can be horrified and confused in the same way. This plane is changeable, ephemeral, eternally transforming. One can get used to that nature and see the beauty of transformation, but somehow in some areas, that fact will bring us some sufferings.

Eternal beings that have traveled through dimensions, universes, planets, passing through different forms of life through reincarnations. Be that as it may, we are here, with a beautiful life, with its shortages and miseries, with its abundances and gifts. We are on a planet where heaven and hell coexist in the same ecosystem. The ego plays tricks on us, lies to us, makes us deceive ourselves, making us believe that we are something we will never be. We create a reality in solitude and we become the gods of our desert island.

Then, when you begin to realize the mistakes of the world, you judge them, you condemn them, then you think you are better than everyone, which is not true. We all have shortcomings and make mistakes, we don't have the right to criticize anyone.

Now, what does this have to do with the song? The worst of all this is that thinking too much also drives you crazy, torments you, overwhelms you. The Cerati song that I bring today is a little bit about madness, how our mental and emotional dependence can make us fragile and fill us with fears. If you think about it, it is something very absurd to become dependent on others, it is madness, however, we tend to make that mistake. To love the madness of the world and of ourselves, to embrace everything, maybe that is the way out, the true inner peace.