A LITTLE PIECE OF THAT I DON'T KNOW WHAT, THAT ALL CHILDREN DESERVE [ENG - ESP]
Recently I had the chance to read a piece of writing from my friend @parauri that I found very interesting, as it has as a turning point the attention, care and dedication that we must give to the little ones of the house.
When a year comes to an end, as parents, we often feel overwhelmed by the pressure to meet the expectations society has placed on our children's lives. We focus on finding the perfect gift, hosting the best dinner party and wearing the most luxurious and expensive clothes.
The December holidays immerse us in nostalgia and strengthen family ties, but they also bring with them an increasingly heavy economic burden. Once we pass these dates and say goodbye to the year that is leaving, we prepare for a new beginning. We get excited about new goals and objectives that we are eager to achieve.
I am aware that seeing the smiles on my children's faces when they receive their Christmas presents fills me with joy and happiness, but at the same time I ask myself, is this really so necessary? I am talking about focusing our attention only on special dates to comply with demands and stereotypes imposed by social schemes.
I believe that we are living in a very hasty and wrong way regarding our children and this discrepancy, in my opinion, is causing a big gap in our next generation, let's remember that each year is undoubtedly like a blank sheet of paper or a huge field that allows us to sow new seeds of love, wisdom and tranquility in the hearts of our children.
So 2024, we must project it differently, it is not just a matter of giving them gifts, be it candy or toys, on the contrary, we must go further, connecting with them, to a point of understanding their real needs.
It is a little ironic my writing, while I develop it, I think about the number of times that I sat in a park with my children alone to meditate, look at the sky and enjoy the movement of the clouds, the truth is that number leads me to a mathematical operation of zero (0) and it is here, where I wonder, in which moments I taught them to meditate, to calm down when they are upset, to understand their feelings and to be more understanding with others.
I think I am at a point where it is still necessary to bet on real changes. So this writing has allowed me to internalize that the role of a parent is not only to provide for economic needs, it involves teaching respect, gentleness, love and compassion, since every gesture and every kind word represents a seed that we plant in their heart, and over time will bear great fruit in the form of confidence and self-esteem.
Think about it dear reader, the issue of providing value to our children is not only at the end of a year, it must be an act that is executed before, during and after each cycle, focusing on teaching them by example to be good people, to respect others and to take care of this world we share.
In this sense, I invite you to think of a world where every child feels valued, loved, but above all respected, I believe that in our life there will be no better goal or purpose than that, since, at the end of our day, those children will be the ones in charge of building the new tomorrow.
VERSIÓN EN ESPAÑOL
Recientemente tuve la posibilidad de leer un escrito de la amiga @parauri que me ha parecido súper interesante, ya que tiene como punto de inflexión la atención, cuidado y la dedicación que debemos aportar a los pequeños de la casa.
Cuando un año llega a su fin, como padres, a menudo nos sentimos abrumados por la presión de cumplir con las expectativas que la sociedad ha impuesto en la vida de nuestros hijos. Nos concentramos en encontrar el regalo perfecto, organizar la mejor cena y lucir las prendas más lujosas y costosas.
Las festividades de diciembre nos sumergen en la nostalgia y fortalecen los lazos familiares, pero también traen consigo una carga económica cada vez más pesada. Una vez que pasamos estas fechas y nos despedimos del año que se va, nos preparamos para un nuevo comienzo. Nos entusiasmamos con las nuevas metas y objetivos que estamos ansiosos por alcanzar.
Soy consciente que el ver las sonrisas que invaden a mis hijos al recibir su regalo de navidad me llena de dicha y alegría, pero al mismo tiempo me pregunto en realidad ¿será esto tan necesario?, hablo de centrar nuestra atención solo en fechas especiales para cumplir con demandas y estereotipos impuesto por esquemas sociales.
Creo que estamos viviendo de manera muy apresurada y errada en lo que respecta a nuestros hijos y esta discrepancia, a mi entender, vienen provocando una gran brecha en nuestra generación de relevo, recordemos que cada año, sin duda es como una hoja en blanco o en su defecto un campo enorme que nos permiten sembrar nuevas semillas de amor, sabiduría y tranquilidad en los corazones de nuestros hijos.
De manera que el 2024, debemos proyectarlo de manera diferente, no es solo una cuestión de darles regalos, llámense dulces o juguetes, por el contrario, debemos ir más allá, conectando con ellos, a un punto de comprender sus necesidades reales.
Resulta un poco irónico mi escrito, mientras lo desarrollo, pienso en el número de veces que junto a mis hijos me senté en un parque solo a meditar, mirar el cielo y disfrutar del movimiento de las nubes, la verdad ese número me lleva a una operación matemática de cero (0) y es aquí, donde me pregunto, en que momentos les enseñe a meditar, a calmarse cuando están alterados, a entender sus sentimientos y a ser más comprensivos con los demás.
Creo que estoy en punto, donde todavía de hace necesario apostar a cambios reales. De modo que este escrito me ha permitido interiorizar que el papel de un padre no solo es de provisión a las necesidades económicas, implica enseñar respeto, dulzura, amor y compasión, ya que cada gesto y cada palabra amable representa una semilla que plantamos en su corazón, y con el tiempo brindara grandes frutos en forma de confianza y amor propio.
Piénsalo estimado lector, el tema de aportar valor a nuestros hijos, no es solo al finalizar un año, debe ser un acto que se ejecute, antes, durante y después de cada ciclo, enfocándonos en enseñarles con el ejemplo a ser buenas personas, a respetar a los demás y a cuidar de este mundo que compartimos.
En este sentido, te invito a pensar en un mundo donde cada niño se sienta valorado, amado, pero sobre todo respetado, creo que en nuestra vida no habrá una mejor meta o propósito que ese, ya que, al finalizar de nuestro día, serán esos niños los encargados de construir el nuevo mañana.
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Feliz año nuevo amigo
excelente reflexión ,es muy importante los valores, enseñarles a para que sean buenos cuidadanos y amorosas.
saludos
Feliz año amiga, que grato verte por estos lados, sin duda como adultos somos los encargados de formar a nuestros chamos para que sean hombres y mujeres de bien y que mejor forma de hacerlo que con el ejemplo.
Saludos y que este bien..
El enseñar valores y principio en los ninos es un trabajo continuo y no condicionado por fechas, así que nuestra labor como padre siempre debe estar atenta y en el proceso sacar esas sonrisas y alegrías de nuestros hijos que sin duda alguna se convierten en nuestra fuerza de empuje y motivación.
Excelente manera de abordar como duele
Siempre amor mío
Hola esposa, estas en lo cierto, no podemos condicionar el afecto que damos a nuestro niños, todos debe ser un proceso constante y pensado en el bienestar de ellos. Gracias por leer y compartir tu punto de vista...