[ENG-SPN] Moon: simply a black swan / Luna: simplemente un cisne negro

Luna is a beautiful female black swan, who, despite living in captivity and residing, apparently, in an idyllic pond, knows all too well the poisoned darts of life, especially when these, far from being a lottery, directly affect that trunk of sensibilities, which, I want to suppose, means, for all living beings, the idealized heart. Luna's soul mate, her companion -both by predestination, it could be assumed, and by choice- embarked, long ago, on that ship that will not return, heading towards that paradisiacal place where souls go to dwell of the dead swans, leaving her completely helpless, especially considering that swans are idealistically monogamous, which is why, unlike many other species -sapiens and less sapiens included- they choose to have only one partner for life. This enviable disposition, whose romanticism touches with melancholic determination the most delicate fibers of sensitivity, is also -and in his case, probably more- a true torture, because, contrary to the evil that turned the insensitive Ahasverus to become the Wandering Jew penitent and walking without rest until the consummation of days for having mocked Jesus Christ when he walked with the cross on his back, on the way to Calvary, the innocence and fidelity of Luna, constitute a path of solitude, whose laments for the loss of the beloved companion, flood the heart - to paraphrase the versatile Verlaine - with monotonous languor.

It is also true that Luna, perhaps not so much because of her beauty as because of the shadow of contrition that has taken over her existence, is one of the most popular and beloved beings of that group of special friends who, objectively speaking, make up the great family that resides in this magical Eden, if such a word can be used, within a world that, after all, seems to be losing sensitivity more and more every day, coming to put aside something so definitely beautiful, such as emotions , as if it were a plague. In this sense, Luna represents, without a doubt, something so sacred and determinative of happiness, such as fidelity and perhaps, for this reason, he has rejected all the suitors that have come his way. It will be, who knows, because Love is still one of the great mysteries of the Universe, against which, following the eminently Socratic position, adopted, even, by one of the most brilliant people of our most immediate past, as it was, that of C.G. Jung, in the end, on the subject, the only sensible thing we can say is, simply, that: I only know, that I know nothing.

Luna es una hermosa hembra de cisne negro, que, a pesar de vivir en cautividad y de residir, aparentemente, en un estanque idílico, conoce, sobradamente, los dardos envenenados de la vida, sobre todo, cuando éstos, lejos de ser una lotería, afectan directamente a ese baúl de sensibilidades, que, quiero suponer, significa, para todo ser vivo, el idealizado corazón. El alma gemela de Luna, su compañero -tanto por predestinación, pudiera suponerse, como por elección- se embarcó, hace mucho tiempo, en esa nave que no ha de tornar, dirigiéndose hacia ese paradisíaco lugar a donde quiera que van a morar las almas de los cisnes muertos, dejándola completamente desamparada, sobre todo, teniendo en cuenta, que los cisnes son idealistamente monógamos, por lo que, a diferencia de muchas otras especies -sapiens y menos sapiens incluidos- optan por tener una sola pareja para toda la vida. Esta envidiable disposición, cuyo romanticismo tañe con melancólica determinación las fibras más delicadas de la sensibilidad, resulta, también -y en su caso, probablemente más- una verdadera tortura, pues, al contrario de la maldad que convirtió al insensible Ahasverus a convertirse en el penitente Judío Errante y caminar sin descanso hasta la consumación de los días por haberse burlado de Jesucristo cuando éste caminaba con la cruz a cuestas, camino del Calvario, la inocencia y la fidelidad de Luna, constituyen un camino de soledad, cuyos lamentos por la pérdida del compañero amado, inundan el corazón -parafraseando al polifacético Verlaine- con monótona languidez.

Cierto es, además, que Luna, quizás no tanto por su belleza como por la sombra de contrición que se ha apoderado de su existencia, es uno de los seres más populares y queridos de ese conjunto de amigos especiales, que, objetivamente hablando, conforman la gran familia que reside en este mágico Edén, si tal palabra puede emplearse, dentro de un mundo, que, al fin y al cabo, parece estar perdiendo cada día más la sensibilidad, llegando a apartar algo tan definitivamente hermoso, como son las emociones, como si de una plaga se tratara. En ese sentido, Luna representa, sin lugar a dudas, algo tan sagrado y determinativo de la felicidad, como es la fidelidad y quizás, por eso, ha rechazado a todos los pretendientes que se le han presentado. Será, quién sabe, porque el Amor, todavía, es uno de los grandes misterios del Universo, frente al que, siguiendo la postura, eminentemente socrática, adoptada, incluso, por una de las personas más brillantes de nuestro más inmediato pasado, como fue, la de C.G. Jung, al final, sobre el tema, lo único sensato que podemos llegar a decir, es, sencillamente, aquello de: yo sólo sé, que no sé nada.

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