Memento | Reseña | Review

Nuestra memoria se mueve en territorios misteriosos, enigmáticos, imprecisos. Cada recuerdo cambia de acuerdo al momento en que se evoca. A veces, con el transcurrir del tiempo recordamos las cosas de forma diferente. Y no es extraño que en algún momento lleguemos a dudar de si aquello que está en nuestra memoria realmente esté relacionado con algo que nos haya ocurrido.

Memento (2000), una de las primeras películas del excelente director y guionista británico, Christofer Nolan, trata de esos problemas relacionados con la memoria.

Leonard Shelby (Guy Pearce) es un exitoso investigador de una compañía aseguradora. Su trabajo consiste en tratar de detectar los fraudes que vayan en perjuicio de la compañía. Es un hombre metódico, disciplinado, y con una intuición muy desarrollada.

Una noche despierta con la sensación de que algo ocurre en su casa. Se levanta, y al abrir la puerta del baño ve a un hombre junto a su esposa que está tirada en el piso. Luego de un ligero forcejeo mata al hombre. Pero de pronto alguien lo golpea por detrás, produciéndole un daño cerebral que afecta su memoria de corto plazo.

A partir de aquel momento la vida de Leonard cambia por completo, no es capaz de recordar lo que ha sucedido hace pocos minutos.

Es impresionante como una condición de ese tipo puede afectar la vida de una persona. Leonard ni siquiera es capaz de sostener una larga conversación. Si alguien está hablando con él en una mesa, o en la barra de un bar, y se levanta para buscar algo en su carro, al regresar y sentarse de nuevo ya Leonard no es capaz de recordarlo. Es como si su memoria se reseteara a cada momento.

En tales circunstancias se vuelve una persona muy vulnerable, cualquiera puede manipularlo, puede ser engañado fácilmente puesto que no recuerda lo último que ha vivido. Aparentemente lo único que se mantiene sólido en su mente es que alguien mató a su esposa y que él está buscando al asesino.

Y es en ese camino de búsqueda que se desarrolla la trama de la película. En su recorrido Leonard se encontrará con algunos personajes claves. Por un lado está Teddy (Joe Pantoliano) quien se presenta como un confidente policial que está ayudando a Leonard, pero todo alrededor de él es confusión y engaño.

También está Natalie (Carrie-Anne Moss), la célebre Trinity de Matrix. Quien aparece como la mujer salvadora que quiere ayudar a Leonard, pero como todo en esta película, nada es lo que parece, y las cosas van cambiando con cada reinicio de la mente de nuestro protagonista.

Este es el tipo de películas que puede dejar descolocado a cualquier espectador. No es fácil seguir su ritmo narrativo. Cada escena significa un viaje al pasado o al futuro, acá nada es lineal.

El director utiliza una serie de recursos muy ingeniosos para meternos en la situación. Como Leonard no recuerda nada se vale de las fotos para armar una memoria. Anda con una Polaroid tomándole fotos a las cosas significativas, los personajes que se le aparecen, los autos que usa, los hoteles donde se aloja. Así, cada vez que se ve confundido saca una fotografía en la que ha dejado alguna nota. Las cosas más significativas las tatúa en su cuerpo, allí tiene grabado, por ejemplo, que debe buscar al asesino de su esposa.

La narración transcurre alrededor de estas notas. Por eso es segmentada. Cada foto nos lleva parcialmente a una situación, nos la presentan y regresamos de nuevo a algún punto de partida. Todo el tiempo avanzamos y retrocedemos.

Esta es una película que explota al máximo las posibilidades del cine como arte. Solo en una película es posible jugar de ese modo con el manejo de los tiempos. Sin la técnica del montaje cinematográfico no sería posible intercalar las escenas que nos creen la ilusión de que estamos en la mente del personaje.

Cualquiera pudiera pensar que una película como esta debería tener muchos efectos especiales, sin embargo acá no es así. Toda la película se arma al estilo tradicional, cortando y pegando, con escenas que se intercalan, y se repiten. La repetición es una de las claves narrativas que usa el director para que los espectadores se orienten en este gran rompecabezas.

Otro gran mérito de las películas son las actuaciones. Destaca por mucho la de Guy Pearce. El personaje de Leonard parece hecho a su medida. No me imagino a ningún otro actor haciendo esta caracterización. La verdad es que al verle con sus gestos de duda, e incertidumbre, logra transmitirnos el infierno que pudiera vivir alguien con esa condición. Sobre todo estando tan consciente como él de que todo lo que le dicen puede ser mentira.

También me gustó mucho la interpretación de Joe Pantoliano. Su personaje de Teddy logra meternos en la piel de un tipo manipulador, que no escatima ningún recurso para confundir a Leonard. Seguramente que muchos lo van a recordar por su risa, una mezcla de burla, trampa y desconsideración.

Menos me gustó la interpretación de Carrie-Anne Moss, le vi poca fuerza a su personaje de Natalie.

Hacía mucho tiempo que no veía está película y en este visionado me volvió a convencer de nuevo. Mi recomendación es que busquen el momento adecuado para verla, cuando no estén apurados ni tengan distracciones a la mano. Acá es importante estar pendiente de los detalles, de otro modo es fácil perderse en la trama. Si tienen la oportunidad véanla, es una de esas pocas películas que resisten el paso del tiempo y siempre darán que hablar. Ahorita la encuentran en Prime Video.

Gracias por tu tiempo.

Fuente de imágenes. I II III IV.

Hago esta publicación para contribuir a sufragar los gastos que tiene mi querido amigo @lecumberre por motivos de salud. Invito a todos a participar del llamado de la comunidad @aliento en la iniciativa Juntos por Lecumberre.

Our memory moves in mysterious, enigmatic, imprecise territories. Each memory changes according to the moment in which it is evoked. Sometimes, as time goes by, we remember things differently. And it is not strange that at some point we come to doubt whether what is in our memory is really related to something that has happened to us.

Memento (2000), one of the first films by the excellent British director and screenwriter Christofer Nolan, deals with these memory-related problems.

Leonard Shelby (Guy Pearce) is a successful investigator for an insurance company. His job is to try to detect frauds that are detrimental to the company. He is a methodical, disciplined man with a highly developed intuition.

One night he wakes up with the feeling that something is going on in his house. He gets up, and when he opens the bathroom door he sees a man next to his wife, who is lying on the floor. After a slight struggle he kills the man. But suddenly someone hits him from behind, causing brain damage that affects his short-term memory.

From that moment on, Leonard's life changes completely, he is unable to remember what happened a few minutes ago.

It is amazing how such a condition can affect a person's life. Leonard is not even able to hold a long conversation. If someone is talking to him at a table, or at the bar, and he gets up to get something in his car, when he returns and sits down again Leonard is no longer able to remember it. It is as if his memory is reset every moment.

In such circumstances he becomes a very vulnerable person, anyone can manipulate him, he can be easily fooled since he does not remember the last thing he has experienced. Apparently the only thing that remains solid in his mind is that someone killed his wife and that he is looking for the murderer.

And it is on that search path that the plot of the film unfolds. On his journey Leonard will meet some key characters. On the one hand there is Teddy (Joe Pantoliano) who presents himself as a police informant who is helping Leonard, but all around him is confusion and deception.

There's also Natalie (Carrie-Anne Moss), the Matrix's celebrated Trinity. Who appears as the savior woman who wants to help Leonard, but like everything in this movie, nothing is what it seems, and things keep changing with each reboot of our protagonist's mind.

This is the kind of movie that can leave any viewer unsettled. It is not easy to follow its narrative rhythm. Each scene means a trip to the past or to the future, nothing is linear here.

The director uses a series of very ingenious resources to draw us into the situation. Since Leonard doesn't remember anything, he uses photos to build up a memory. He goes around with a Polaroid taking pictures of significant things, the characters that appear to him, the cars he uses, the hotels where he stays. So, every time he gets confused, he takes a picture where he has left a note. The most significant things he tattoos on his body, where he has engraved, for example, that he must look for his wife's murderer.

The narrative revolves around these notes. That is why it is segmented. Each photo takes us partially to a situation, we are introduced to it and we return again to some starting point. All the time we move forward and backward.

This is a film that exploits to the maximum the possibilities of cinema as an art. Only in a film is it possible to play in this way with the management of time. Without the technique of film editing it would not be possible to intersperse scenes that create the illusion that we are in the character's mind.

Anyone would think that a film like this should have a lot of special effects, but here it is not so. The whole movie is put together in the traditional style, cut and paste, with scenes that are intercut and repeated. Repetition is one of the narrative keys used by the director to help viewers find their way through this great puzzle.

Another great merit of the films are the performances. Guy Pearce's performance stands out by far. The character of Leonard seems tailor-made for him. I can't imagine any other actor doing this characterization. The truth is that seeing him with his gestures of doubt and uncertainty, he manages to convey the hell that someone with that condition could live. Especially being as aware as he is that everything he is told could be a lie.

I also really liked Joe Pantoliano's performance. His character of Teddy manages to get us into the skin of a manipulative guy, who spares no resource to confuse Leonard. Surely many will remember him for his laugh, a mixture of mockery, trickery and thoughtlessness.

I was less pleased with Carrie-Anne Moss's performance, I saw little strength to her character of Natalie.

It had been a long time since I had seen this film and in this viewing it convinced me again. My recommendation is to find the right time to watch it, when you are not in a hurry and do not have distractions at hand. Here it is important to be aware of the details, otherwise it is easy to get lost in the plot. If you have the chance, see it, it is one of those few movies that stand the test of time and will always be talked about. You can find it now on Prime Video.

Thanks for your time.

Image source. I II III IV.

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Hasta una próxima entrega. Gracias.



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