Querida comunidad, quería compartir con ustedes el almuerzo que tuve en compañía de mi mejor amiga y su esposo en esta semana.

Hacía mucho tiempo que no compartíamos fuera de casa, ellos suelen ir todos los fines de semana a mi casa a pasarse el día con los dos hijos de ellos que son mis ahijados, más que eso mis sobrinos, porque ella más que amiga es la hermana que nunca tuve, nos conocemos desde hace 14 años y desde entonces hemos estado en las buenas y en las malas.

Estaba en el trabajo terminado la consulta cuando recibí una llamada de ellos y me invitaron a almorzar con ellos en la cafetería El Regente, de la cual les he hablado en otra ocasión. Me emocionó mucho la invitación y rápidamente llegué, dándole un gran abrazo y un beso, compartimos varias historias del trabajo, sí, los médicos tenemos la mala costumbre de no parar de hablar del hospital y los pacientes. También hablamos de la familia, nuestros padres y los niños.

Disfrutamos mucho de lo que nos pedimos para comer, mi amiga y yo nos pedimos unas fajitas de pollo que venían acompañadas de plátanos fritos que estaban deliciosas, un sabor exquisito, yo me pedí un frapuchino que es mi favorito y ella un batido de helado de coco, que me dio a probar y estaba muy rico.

Su esposo pidió un sándwich y terminó de comerse lo que ella dejó de las fajitas, también se pidió un batido de fresa y una cerveza. Terminamos con un rico café expreso.

Fue una tarde diferente, decidimos compartir más seguido fuera de casa, la vida no puede ser siempre de rutina, aún somos jóvenes y la vida es una sola, debemos atesorar momentos así.

English Version

Dear community, I wanted to share with you the lunch I had with my best friend and her husband this week.

It had been a long time since we shared outside the house, they usually go every weekend to my house to spend the day with their two children who are my godchildren, more than that my nephews, because she more than a friend is the sister I never had, we have known each other for 14 years and since then we have been in good times and bad.

I was at work finishing the consultation when I received a call from them and they invited me to have lunch with them at the cafeteria El Regente, which I have told you about on another occasion. I was very excited about the invitation and quickly arrived, giving them a big hug and a kiss, we shared several stories from work, yes, we doctors have a bad habit of not stopping to talk about the hospital and the patients. We also talked about family, our parents and children.

We enjoyed a lot of what we ordered to eat, my friend and I ordered chicken fajitas that came with fried plantains that were delicious, an exquisite flavor, I ordered a frapuchino which is my favorite and she ordered a coconut ice cream shake, which she gave me to taste and it was very tasty.

Her husband ordered a sandwich and finished eating what she left from the fajitas, she also ordered a strawberry shake and a beer. We finished with a delicious espresso coffee.

It was a different afternoon, we decided to share more often outside the house, life cannot always be routine, we are still young and life is only one, we must treasure moments like this.

Source*
All photos are taken and edited on Snapseed.
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