Anclado en Paris
Un antiguo tango que hizo popular Carlos Gardel en la década de 1930 tenía por título "Anclado en Paris" y se refería a la nostalgia y su imposibilidad de regresar a Buenos Aires desde la ciudad luz debido a la falta de dinero para adquirir un pasaje en algún crucero que por aquel entonces realizaban el largo viaje entre Europa y Sudamérica.
Aquí no es por falta de dinero, en realidad ya tenía comprados y pagados los pasajes desde hace un mes pero el clima, particularmente el viento que sopla fuertemente en la Patagonia desde hace un par de días, motivó que los vuelos fueran desviados hacia otra provincia y no pudiéramos volver a nuestro hogar.
Todo se reprogramó y nosotros decidimos quedarnos hasta el sábado, hoy el viento que no cesa, probablemente haga que nuevamente se cancele el viaje y no quiero volver a tener que hacer la interminable cola delante de los mostradores de la aerolínea para tramitar el cambio.
Entonces aprovecharemos para pasear un poco más, tomar fotografías y pasar más tiempo con nuestro nieto.
Pese al viento y al frío que no se quiere ir del todo, la primavera se siente fuerte por estos parajes y se ve, principalmente en las flores que explotan de colores y formas en un caleidoscopio interminable; por donde vayamos hay flores que reconfortan la vista y aguzan nuestro olfato en una sinfonía de olores armoniosos que invitan a soñar.
No conozco el nombre de todas, pero con ayuda de nuestros amigos y familiares que viven aquí desde hace muchísimos años vamos aprendiendo, hay arbustos de lilas donde resalta ese particular color parecido al azul pero distinto, también aprendimos que hay arbustos de lilas que dan flores blancas, iguales a las lilas en su forma pero distintas a la vista por su color.
Los tulipanes resaltan también por la amplia variedad de colores y aunque su mejor época está pasando, todavía quedan resabios de su belleza en algunos jardines del pueblo.
En la casa de nuestros amigos hay una enorme variedad de plantas y su jardín rebosa de flores y árboles frutales a los que todavía les falta un tiempo para poder hacer dulces con sus frutos.
Definitivamente es un lugar privilegiado que reluce en primavera, luego del largo y duro invierno.
Anchored in Paris
An old tango made popular by Carlos Gardel in the 1930s was titled "Anclado en Paris" and referred to his impossibility of returning to Argentina from the city of light due to lack of money to purchase a ticket on a cruise that At that time they made the long journey between Europe and South America.
Here it is not due to lack of money, in reality, I had already bought and paid for the tickets a month ago but the weather, particularly the wind that has been blowing strongly in Patagonia for a couple of days, caused the flights to be diverted to another province. and we could not return to our home.
Everything was rescheduled and we decided to stay until Saturday, today the wind that does not stop will probably cause the trip to be canceled again and I do not want to wait in the endless line in front of the airline counters to process the change.
Then we will take the opportunity to walk a little more, take photographs, and spend more time with our grandson.
Despite the wind and the cold that does not want to go away completely, spring feels strong in these places and is seen, mainly in the flowers that explode with colors and shapes in an endless kaleidoscope; Wherever we go there are flowers that comfort our eyes and sharpen our sense of smell in a symphony of harmonious smells that invite us to dream.
I don't know the names of all of them, but with the help of our friends and family who have lived here for many years we are learning, that there are lilac bushes where that particular color similar to blue but different stands out, we also learned that there are lilac bushes that give flowers white, equal to lilacs in shape, but different to the eye due to its color.
Tulips also stand out for their wide variety of colors and although their best period is passing, there are still remnants of their beauty in some gardens in the town.
In our friends' house, there is a huge variety of plants and their garden is overflowing with flowers and fruit trees that still need some time to make sweets with their fruits.
It is definitely a privileged place that shines in spring, after the long and hard winter.
Héctor Gugliermo
@hosgug
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