La Educación Científica en el mundo de hoy

Los cambios que ocurren en el mundo donde vivimos, conllevan a impresionantes cambios y avances en el tema de la ciencia y la tecnología, que deben aportar nuevos conocimientos, plantear exigencias más relevantes y provocar gigantescos cambios en todos los escenarios de la educación a nivel mundial. Pero a la vez, esto también trae como consecuencia que se agraven de una manera alarmante los problemas sociales, económicos ambientales y éticos, que son derivados del modelo socioeconómico imperante en la sociedad desarrollada. Es por ello, que en tal alarmante situación de crisis e incertidumbre, la educación debe asumir un gran compromiso y hacer un profundo análisis sobre el rol que debemos desarrollar y los aportes que podemos realizar para mejorar significativamente tanto la educación, como la sociedad en general.

Sin embargo, para poder lograr dichos avances debemos comenzar desde el ámbito investigativo y seria propicio preguntarnos, ¿Qué educación científica es relevante en el mundo actual? Antes de responder la interrogante principal de este artículo, es importante acotar que el fin de la educación es preparar a los individuos para que estos puedan satisfacer las necesidades de la sociedad donde se desenvuelven, es por tal motivo, que la educación está directamente relacionada con el hogar y la sociedad en general. Pero, para poder satisfacer las diferentes demandas que se presentan, ella se apoya en la investigación científica, por lo que se puede decir que desde el siglo XXI la investigación se ha convertido en la piedra angular de la educación.

Asencio (2014) visualiza a la investigación “como el motor para la formación de ciudadanos comprometidos, que les permite participar responsable y críticamente en las decisiones que orientan la ciencia y la tecnología hacia un desarrollo sostenible”. Lo que quiere decir, que el individuo debe asimilar los conocimientos y habilidades desde el punto de fenómenos complejos que conlleven al intercambio de información desde los filtros valorativos, sociológicos, culturales y prácticos. Es decir, que la adquisición activa del conocimiento desde el punto de vista científico y el propio interés social por la ciencia son dos fenómenos que tienen mucho que ver, que se encuentran entrelazados, ya que su fin está en ver las necesidades particulares de los ciudadanos y con la manera en la que, la ciudadanía satisface sus necesidades, usa y se relaciona con la ciencia, la tecnología y la innovación.

Ahora bien, según el autor Martin (2006) resalta que:

Es decir, que el autor establece que educar para conocer, en si lo que trata es de recuperar la relevancia no instrumental del conocimiento como principio genuino de la actividad educativa; la necesidad de la educación en estos momentos es educar para valorar, esto significa que se debe reconocer la importancia de lo axiológico en la formación de las personas, con el fin de favorecer el desarrollo del juicio moral y estético, también implica educar para incentivar la participación de los educandos, esto es propiciando escenarios donde es posible aprender a tomar decisiones que componen la vida social.

Partiendo de lo ya mencionado, podemos ver la importancia de la educación científica donde el fin principal es educar para valorar y participar, cuanto más cercana sea la vinculación que existe entre la adquisición de conocimiento desde una posición afectiva y una aproximación valorativa, más efectiva será la formación de ciudadanos para la vida pública capaz de satisfacer las necesidades de la sociedad actual, donde sean capaces de transformar y llevar a cabo innovaciones que den respuesta a las diferentes problemáticas.

En conclusión y como respuesta a la pregunta central del presente artículo podemos establecer que muchos son los retos que como docentes enfrentamos en la actualidad, es propicio encaminar la educación científica a la satisfacción de las necesidades que se presentan en la actualidad, tomando en cuenta todas las posibles consecuencias; a su vez poder alcanzar una educación científica que camine en pro de las exigencias del desarrollo tecno-científico es tarea de todos. Por otra parte, se debe cambiar las estructuras de la educación y educar en contenidos actuales de ciencia y tecnología que contribuyan a la formación ciudadana con un carácter integral, crítico, dejando atrás la educación tradicional y repetitiva. Esta debe ser la prioridad de todas las instituciones educativas.

Asencio, E. (2014). Una aproximación a la concepción de ciencia en la contemporaneidad desde la perspectiva de la educación científica. Revista Ciencia. Educacion., Bauru, 20(3), 549-560. Disponible en: http://dx.doi.org/10.1590/1516-731320140030003

Martín, M. (2006). Conocer, manejar, valorar, participar: los fines de una educación para la ciudadanía. Revista Iberoamericana de Educación , 42. Recuperado de http://www.campus-oei.org/revista/rie