Hace largo rato que no me tomo un descanso, por lo general el trabajo como madre a tiempo completo, es, básicamente, a tiempo completo, 24/7, no hay tiempo para descanso, aun cuando tenemos un día libre, por lo que, generalmente un sábado normal para mí, se traduce en despertar 30 minutos más tardes (me puedo dar ese lujo) y luego ir al cuarto de lavado a ordenar la ropa sucia y comenzar la faena de lavado, que probablemente termino a medio día para ir a preparar almuerzo, para luego salir a hacer algunas compras a media tarde, y llegar a preparar cena y con suerte, ver alguna película, si es que Mathias me lo permite jajaja, y siendo sincera ya hace rato que no había pensado en cómo sería mi sábado ideal, hasta que #ladiesofhive trajo este nuevo concurso semanal haciéndonos esta pregunta, si quieres leer un poco más, aquí te dejo la publicación.



Para mí un buen sábado debería comenzar a las 10:00 am jajaja, luego de un buen descanso, pero ya estoy en una edad adulta, en la que muy a mi pesar, cuando duermo después de las 8:00 am me duele todo el cuerpo jajaja (¿Dónde quedo aquella joven mujer que podía despertar a mediodía?), sin embargo, y teniendo en cuenta lo mucho que me gusta la playa, y que la más cercana queda a un par de horas, lo que implica madrugar para poder llegar temprano y disfrutar de un buen día en la playa. Viajar en compañía de mis hermanos, mis padres y mi hijo, que para mí son la mejor compañía en estos lugares, disfrutar de un buen paseo en lancha para llegar a La Ciénaga, esta es por mucho mi playa favorita, sus aguas cristalinas y calmadas son perfectas para una escapada de fin de semana.



Recuerdo que, en mi época de estudiante universitario, solía irme algunos sábados a la playa con mis amigos, para recargarnos de fuerza y energía para la semana de actividades en la universidad, definitivamente la playa es uno de esos lugares en donde podemos recargarnos de buenas energías. Terminar un día de playa en un rio de agua dulce es realmente de las cosas más relajantes, y con eso aprovechamos de sacarnos toda esa sal que suele dejarnos el cuerpo con una especie de pegote un tanto desagradable.



Entonces, definitivamente mi sábado perfecto seria en la playa, con mi familia, una buena cerveza bien helada, y no puede faltar el pescado frito a orillas del mar, porque no hay día perfecto para una madre, si tiene que cocinar jajaja, entrada la tarde un buen baño de agua dulce y refrescante, y para cerrar el día una salida nocturna al malecón más cercano en donde preferiblemente se pueda bailar un rato, para luego regresar a dormir en una buena posada, pues el domingo no quiero hacer camas, solamente despertar, ir a algún sitio a comer unas deliciosas empanadas y luego regresar a casa bien descansada, a preparar todo para comenzar una nueva semana con buena actitud.

_{Imágenes de mi propiedad, tomadas de mis álbumes familiares, editadas con Snapseed, PicsArt, Photoroom y Canva}

Gracias por tomarse el tiempo de leer esta publicación, si tiene alguna pregunta, crítica o sugerencia, le agradecería dejarla en la caja de comentarios, y recuerda, ¡Tú también puedes hacer magia en la cocina ya dondequiera que vayas!

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