The City and my Bike

Hi how are you, this afternoon I was doing my evening tours, when I'm not going to play basketball I go out on my bike to tour the west of my city. Today I didn't think there would be much to see, since in the early hours the day was cloudy and rainy, so I left without much hope other than to stretch my legs a bit. To my surprise, everything changed in the blink of an eye, I was walking along the highway when I began to climb it, the sky was all gray, and the sun was hiding in the mountains somewhat defeated and with a dim light, suddenly I saw a sign in the sky, very beautiful cumulus clouds were forming, that was enough for me to know that I should stop the march and stay there for a while, and in a matter of minutes the magic appeared.

The sky lit its festival of lights and a red fire was taking over the nobes, I love twilights and in my city they are very common, the feeling of witnessing one for me is something indescribable, I disconnect and let myself be carried away by the march of the sun. It is a pleasure to be able to share with you these little moments that are like an oasis in the middle of so much gray and senseless desert.

Hola que tal, esta tarde estuve haciendo mis recorridos vespertinos, cuando no voy a jugar basket salgo en mi bicicleta a recorrer el oeste de mi ciudad. Hoy no pensé que habría mucho que ver, ya que en horas mas tempranas el día estuvo nublado y lluvioso, así que salí sin muchas esperanzas más que de estirar un poco las piernas. Para mi sorpresa todo cambio en un abrir y cerrar de ojos, me encontraba recorriendo la autopista cuando comencé a ascender por ella, el cielo estaba todo gris, y el sol se ocultaba en las montañas algo derrotado y con una luz tenue, de pronto vi en el cielo una señal, cúmulos de nubes muy hermosas se estaban formando, eso fue suficiente para saber que debería detener la marcha y quedarme ahí un buen rato, y en cosa de minutos la magia aparecio.

El cielo encendió su festival de luces y un rojo fuego se iba apoderando de las nobes, amo los crepúsculos y en mi ciudad son muy habituales, la sensación de presenciar uno para mi es algo indescriptible, me desconecto y me dejo llevar por la marcha del sol. Es un gusto poder compartir con ustedes estos pequeños momentos que son como un oasis en medio de tanto desierto gris y sin sentido.

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