Ladies of Hive Community Contest #198: Friendship (ESP-ENG)

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¡Hola a todas las damas y caballeros de Ladies of Hive! Por supuesto que compartir momentos de risas incontrolables con los amigos es algo maravilloso. Recuerdo a una amiga en particular cuya risa sonaba como la trompeta de un elefante; provocaba que todo el mundo se burlara de ella (siempre de forma cariñosa) y, para colmo, ella también se reía de su gracioso sonido al reírse.

Muchas veces en la edad adulta, como madre o con mucho trabajo y poco tiempo libre, es bueno quedar con nuestros amigos. ¿Cuánto hace que no compartes momentos de risa con tus amigas?

Hace poco, disfruté de una fiesta familiar con mis primas, mis tías y mi madre, y nos reímos mucho. Sin embargo, cuando pienso en mis amigos de la universidad, el preuniversitario, la secundaria y la escuela primaria, me doy cuenta de que hace mucho tiempo que no compartimos momentos juntos. Se ha vuelto casi imposible. Algunos de mis amigos están en Facebook, donde intercambiamos pinceladas de nuestras vidas y hablamos de vez en cuando, pero no se puede comparar con la calidez de una conversación frente a frente.

En los primeros momentos de Internet en Cuba, no usaba mucho el celular para las redes sociales porque no entendía muy bien cómo funcionaba. Tenía una amiga que me ayudaba hasta que un día ella me dijo que debía aprender a manejarlo yo misma. Soy bastante buena con la tecnología, así que enseguida me familiaricé con Facebook. Me hice adicta desde que aprendí a usarlo, viendo cómo mis amigos publicaban fotos de sus actividades casi al instante. Cada vez que me conectaba, encontraba a alguien haciendo algo nuevo, lo que me alegraba el día y acortaba la distancia entre nosotros. Sin embargo, con el tiempo, Facebook perdió su encanto y se convirtió en una red bastante tóxica.

Echo mucho de menos lo divertido que es estar con mis amigos. Recuerdo un día en que la pasé muy bien en la graduación de un amigo ingeniero de telecomunicaciones, que nos invitó a celebrar con él en una piscina. Era el tipo de persona que atraía a amigos de todas las carreras, y aquel día fue inolvidable porque conocí a mucha gente y me reí un montón. La fiesta duró hasta las cinco de la mañana, y lo celebramos por todo lo alto en plena calle de Pinar del Río (provincia occidental de Cuba). En la foto inicial, se puede ver el lugar donde celebramos la fiesta, justo detrás de donde aparezco con una amiga de la universidad llamada Rachel, sobre una escultura con forma de botas de trabajo.

Ese día de la foto, casualmente, es un bonito recuerdo de diversión con mis amigas de la universidad, aunque ellas estaban en un curso diferente al mío. Yo soy mayor que ellas, pero nos hicimos amigas porque a veces salíamos juntas a las fiestas; eran un grupo increíblemente divertido.

La verdad es que me gustaría crear nuevos recuerdos con mis amigas y ya he planeado salir en alguna ocasión con algunas de ellas. Lo que ocurre es que la mayoría han formado una familia, son madres solteras o estamos demasiado inmersas en nuestros proyectos personales.Pienso que la vida es demasiado corta para dejar que la rutina nos consuma. Tenemos que hacer un esfuerzo para reconectar, organizar una salida y celebrar los años de amistad. Al fin y al cabo, esos momentos son los que verdaderamente se recuerdan con gran alegría.