Una nueva clase de pintura. Hicimos un desierto en puntillismo || A new kind of painting. We made a desert in pointillism ♥

El pasado sábado tuvimos una nueva clase en el curso de pintura y dibujo para niños. Esta vez me tocaba viajar a la otra sede de la academia, que queda en R5 (a unos 15 minutos en carro).

Ese día yo estaba un poco desganadita de ganas de salir porque el calor que estaba haciendo era terrible, pero aún así me vestí y salí para dar la batalla.

Me llevé a mi hijo para que me hiciera compañía y que también aprovechara de ir adelantando su trabajo para la clase que tendremos el día de hoy en la academia.

Cuando llegamos a la avenida para tomar el transporte estábamos súper acalorados porque mi paraguas se rompió y nos tocó caminar más de 12 cuadras con el sol pegando en nuestros rostros. Nada fácil vivir con este clima.

Para esta clase estaríamos hablando del punto y la línea. Últimamente no me detengo mucho a explicarles la teoría a los niños porque esto es algo que suele aburrirlos mucho y que no entienden del todo bien, por eso me centro más en explicarles con la práctica.

Les doy los términos básicos y luego nos vamos directamente a la práctica. Para esta clase tenía planeado que hiciéramos un desierto en puntillismo. Ellos mismos debían dibujar el paisaje y luego le agregaríamos color utilizando la base de los pinceles.

Poco a poco los niños fueron trabajando en sus blogs, al principio lo veían como algo eterno e imposible, pero a medida que fuimos avanzando comenzaron apreciar el resultado de su trabajo y se motivaron más en terminarlo.

En todo momento les fui guiando con los colores que iban a utilizar porque se sentían un poco inseguros al no conocer la técnica.

Por otro lado mi hijo estaba trabajando con unos cactus, que forman parte de la clase de perspectiva.

El primero en terminar fue el más pequeño de los niños. El entendió perfectamente la actividad y lo hizo súper bien y rápido.

Luego le entregué un dibujo que tenía en mi carpeta para que coloreara y bien entusiasmado comenzó a agregarle color, aunque no le dio tiempo de terminar y se lo llevó a casa para hacerlo.

Al cabo de un rato el otro niño terminó su pintura. Como faltaban solo 20 minutos para terminar la clase, le di una hoja para que dibujara algo libre para pasar el rato.

Así concluyó la clase y los niños se fueron bien contentos y satisfechos por su trabajo.

Mi hijo y yo caminamos para esperar el transporte público y en eso pasó un vecino nuestro que nos acercó hasta la casa sin cobrarnos nada.

Terminó todo muy bien y la pasamos súper, mi hijo y yo grabamos un video para celebrar el triunfo, ya esto se está haciendo parte de la rutina de clases jaja.

Gracias por acompañarme en esta nueva aventura. Nos leemos pronto. ♥