Maybe a few years ago, if you’d asked me what I thought Identity was, I’d give you some answer along the lines of knowing who you are and what you represent, and in a way, that is what I’ll still answer today but, it is as clear as day. I do not have to think about my answer or how I would present it for the world to like me. In case you had not noticed, the world does not care and as for me, I would rather not burden myself with trivial things.

Identity

Photo by Thiago Rosarii from Pexels

There is so much power in this word. Knowing who you are is enough to face the most chaotic battles and all. I came across a question that went, “if you take away your family name, your job, friends, praises, achievements, who will you be?”

That was a hard one. I stared at the question repeatedly wondering just who thought it was okay to get up and throw such a question into the world. I am grateful to that person though because I realised that Identity is way beyond family, what you have and what you want. I came to that cross road where I realised that I had no idea who I was should I be stripped. Just who was I save for the constant work, the friends, banter with people and others? It was confusing. It was scary. I was made to confront a side of me that I never knew existed and that side was that without Purpose.

Human Identity

There is an article I read about Human satisfaction and something that had to do with socio-economic hazards (or something like that). It covered the subject of purpose and how much of a role it plays in the society we see today. It also delved into the talk of human psychology towards work and making a difference and how this need is being exploited today even without us noticing it. Coming across this topic for the Inleo prompt, I was reminded of that article.

Like every other person in this world, I believe I play a role, a purpose no matter how big or small. Where the fight truly starts is accepting my role. You see, I have big dreams which I know will manifests (because I am working to make sure they will) despite the setbacks, and so are many of us. Many of us draw our identity from purpose. What I want to know is if we truly accept what our God-given purpose is? Let me explain.

The Ever Present Need To Be

As I explained above, I believe that everyone plays a role. The matter is if we are willing to accept it. You see, we people always have a way of letting the world get to us and breaking our ability to see. We compare ourselves with different people believing we will be fulfilled if we are just like them. However, how many times have we stopped to think that there are no big or small roles? How many times have we stopped to think that every person has a part to play in this gigantic ecosystem? How many times do we stop to think that no matter how minute it seem, that role was given to us and no one can execute it like we do?

Photo by Mikhail Nilov from Pexels

You see, I stopped to ponder on who I was. There is a reason I am unapologetic in how I talk and relate with people. There is a reason I strut with confidence. I have had people come up to me, some to tell me to ‘calm down’ and others to sing their praise of admiration at how I navigate life, all these people watch me from afar and came to a conclusion about me. Some are wrong and some are remotely right, this however does not stop me from being my own person, embracing who I am with no fear or doubt.

When I look within, take away the name and all I have achieved so far, I am still a young girl with a hunger you can never know because you are not me. I am someone who has finally made peace with the role I have been given to play in this life and thanks to that, no one (not a person or the world) can ever break me. Because strip away all you see in front of you and the person, who stands in place is still with a pen and a paper. I observe, I learn and then I create. That is who I am. A creator. I create. That is my identity.

Conclusion: Acceptance

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Above I made mention of roles and how accepting them can make life so much better. Coming to terms with your role no matter how small it may seems will create a dam of contentment within you, you never knew existed. You come to a realization that you do not need to fight so hard for your place.

Your role or purpose could be being a mom, accept it. It could be being a supportive partner, accept it. It could be being a teacher, doctor, or just being a friend, a listening ear, accept it. Embrace it. That is where your super powers lie. It is only by being at peace with your identity, that you can unlock every other ability within you.

SPANISH

Puede que hace unos años, si me hubieras preguntado qué creía que era la identidad, te hubiera dado alguna respuesta en la línea de saber quién eres y qué representas, y en cierto modo, eso es lo que sigo respondiendo hoy, pero, está más claro que el agua. No tengo que pensar mi respuesta ni cómo la presentaría para gustarle al mundo. Por si no te habías dado cuenta, al mundo no le importa y en cuanto a mí, prefiero no agobiarme con cosas triviales.

Identidad

Photo by Thiago Rosarii from Pexels

Hay tanto poder en esta palabra. Saber quién eres es suficiente para afrontar las batallas más caóticas y todo eso. Me encontré con una pregunta que decía: «si te quitas el apellido, el trabajo, los amigos, los elogios, los logros, ¿quién serías?».

Era difícil. Me quedé mirando la pregunta repetidamente preguntándome quién pensaba que estaba bien levantarse y lanzar semejante pregunta al mundo. Pero estoy agradecida a esa persona porque me di cuenta de que la identidad va mucho más allá de la familia, de lo que tienes y de lo que quieres. Llegué a ese cruce de caminos en el que me di cuenta de que no tenía ni idea de quién era si me desnudaban. ¿Quién era yo salvo por el trabajo constante, los amigos, las bromas con la gente y los demás? Era confuso. Daba miedo. Me vi obligada a enfrentarme a una parte de mí que no sabía que existía y esa parte era la que no tenía propósito.

Identidad humana

Hay un artículo que leí sobre la satisfacción humana y algo que tenía que ver con los peligros socioeconómicos (o algo así). Trataba el tema del propósito y el papel que desempeña en la sociedad actual. También se hablaba de la psicología humana respecto al trabajo y a marcar la diferencia, y de cómo esta necesidad se explota hoy en día incluso sin que nos demos cuenta. Al encontrarme con este tema para el tema de Inleo, me acordé de ese artículo.

Como cualquier otra persona en este mundo, creo que tengo un papel, un propósito, por grande o pequeño que sea. Donde realmente empieza la lucha es aceptando mi papel. Verás, tengo grandes sueños que sé que se manifestarán (porque estoy trabajando para asegurarme de que así sea) a pesar de los contratiempos, al igual que muchos de nosotros. Muchos de nosotros extraemos nuestra identidad del propósito. Lo que quiero saber es si realmente aceptamos cuál es el propósito que Dios nos ha dado. Me explico.

La siempre presente necesidad de ser

Como he explicado antes, creo que todos desempeñamos un papel. La cuestión es si estamos dispuestos a aceptarlo. Verás, las personas siempre tenemos una forma de dejar que el mundo nos afecte y rompa nuestra capacidad de ver. Nos comparamos con otras personas creyendo que nos sentiremos realizados si somos como ellos. Sin embargo, ¿cuántas veces nos hemos parado a pensar que no hay papeles grandes ni pequeños? ¿Cuántas veces nos hemos parado a pensar que cada persona tiene un papel que desempeñar en este gigantesco ecosistema? ¿Cuántas veces nos hemos parado a pensar que por ínfimo que parezca, ese papel nos fue dado y nadie puede ejecutarlo como nosotros?

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Me paré a reflexionar sobre quién era yo. Hay una razón por la que hablo y me relaciono con la gente sin pedir disculpas. Hay una razón por la que me pavoneo con confianza. Ha habido gente que se me ha acercado, algunos para decirme que «me calmara» y otros para alabarme y admirarme por cómo me desenvuelvo en la vida. Algunos están equivocados y otros tienen razón, pero eso no me impide ser yo misma, aceptar lo que soy sin miedo ni dudas.

Cuando miro en mi interior, me quito el nombre y todo lo que he conseguido hasta ahora, sigo siendo una chica joven con un hambre que nunca podréis conocer porque no sois yo. Soy alguien que por fin ha hecho las paces con el papel que me ha tocado desempeñar en esta vida y, gracias a eso, nadie (ni una persona ni el mundo) podrá doblegarme jamás. Porque si quitas todo lo que ves delante de ti, la persona que está en su lugar sigue teniendo un bolígrafo y un papel. Observo, aprendo y luego creo. Eso es lo que soy. Un creador. Yo creo. Esa es mi identidad.

Conclusión: Aceptación

Photo by David Kwewum from Pexels

Antes he hablado de los roles y de cómo aceptarlos puede hacer la vida mucho mejor. Aceptar tu papel, por pequeño que parezca, creará en ti un dique de satisfacción que no sabías que existía. Te das cuenta de que no necesitas luchar tanto por tu lugar.

Tu papel o propósito puede ser ser madre, acéptalo. Puede ser ser un compañero que te apoya, acéptalo. Puede ser ser profesor, médico, o simplemente ser un amigo, un oído que escucha, acéptalo. Acéptalo. Ahí es donde residen tus superpoderes. Sólo si estás en paz con tu identidad podrás desbloquear todas las demás habilidades que hay en ti.

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This is my entry to the 07th Day of the September INLEO monthly initiative in the Humanitas Community. Translated using DeepL.