"Raíces de Amor: La Huella de una Madre en Nuestras Vidas"

Antes de ser madre, tuve sueños y un universo de metas por cumplir, cada día deseaba tocar fronteras a las que nadie podia haber llegado y me aferraba a las aspiraciones, como quien se cuelga a las lianas cuando es evidente el precipio, mis ilusiones eran la energía que movia mi cuerpo incluso cuando desertar no era una opción, creia ciegamente en la idea de cumplir cada aspiración en tiempos bien cronometrados y calculados.

Pero la vida fué pasando y las metas iban según el plan trazado, las cosas estaban fluyendo conforme se tenia estipulado, los tropiezos habián sido minímos y la vida estaba siendo gratificante en diferentes aspectos, por lo que la tranquilidad y el sueño eran los mejores compañeros, las conexiones mas profundas y significativas eran con amigos, familiares o parejas, además el tiempo y recursos eran para autocuidado, desarrollo personal y crecimiento profesional, la búsqueda de educación, viajes, hobbies y otras experiencias eran esencial para enriquecer la vida.

Tras una vida tranquila llena exclusivamente de desafíos personales, llegó un matiz diferente, pues el destino transcendio de lo personal a lo irrevocable SER MAMÁ allí nuestro corazón se abrió a ejecutar una danza de responsabilidad, amor, alegría y esfuerzo donde ser el arquitecto de los sueños de otro será un desafío de por vida.

Hoy quiero dar un tributo a la inmensidad de tu amor y a los sacrificios que has hecho por tus hijos a lo largo de la vida, a veces, es fácil olvidar lo que hay detrás de cada gesto, cada caricia y de cada esfuerzo, por eso vamos a poner en palabras lo que siente una madre y todo a lo que renunció por criar a sus hijos.

Como olvidar aquellos días en los que al despertar, aún se notaba el cansancio que inundaba el cuerpo, pero no había manera de renunciar para que el día de nuestros hijos comenzara con alegría aún existiendo noches de desvelo, atender las necesidades de ellos no podía ser una misión fallida, ayudar con las tareas y esperar la llegada a casa después de la escuela, era un hábito inrrompible, porque las horas de escuchar historias, frustraciones y sueños eran el testimonio del amor incondicional que detenía el tiempo y extinguia el cansancio.

A lo largo de los años, comprendemos que ser madre es un acto de entrega total, porque la maternidad no es solo dar la vida, sino también vivir para los demás, renunciar a los a sueños propios, momentos de tranquilidad, deseos personales son los desafios para asegurar que los hijos tengan las mejores oportunidades, a esto se le suma que nuestros descendintes no se imaginan como habrían podido ser si no hubieramos tomado la decisión de dedicarles por completo toda nuestra fuerza, las noches en las que podríamos haber salido a disfrutar con amistades, aquellos viajes que quizás soñamos hacer, o incluso el tiempo que se pudo haber pasado enfocándonos en pasiones propias; todo eso quedó relegado a un segundo plano, porque elegiste ser la madre que siempre has sido.

Hoy quiero agradecerte desde lo más profundo de mi corazón. Gracias por cada abrazo en los momentos difíciles, por los consejos sabios que me impidieron caer en caminos equivocados, por enseñarme a ser fuerte y valorar la vida, por cultivarme el amor y el conocimiento, además de hacerme comprender que el esfuerzo siempre lleva sus frutos. Fuiste mi primera maestra sin dudar un segundo en mi potencial como ser humano, incluso cuando yo mismo dejé de hacerlo, por impulsarme a alcanzar mis sueños.

El amor de una madre es un refugio seguro, por eso quiero darte gracias al ser mi cueva ante la adversidad, donde un cálido abrazo me ha brindado consuelo, no olvidaré las noches que te llamaba asustado o confundido, y siempre encontrabas las palabras adecuadas para calmarme. Eres mi amor incondicional que se vuelve impulsor y reparador, como un bálsamo para el alma, en mi mente quedará grabado la manera en que cuidas de mí, la paciencia que has desarrollado y la dedicación que ofreces cada día son ejemplos de la verdadera grandeza de tu sentimiento para mi.