Pretender edificar el liderazgo a través de las palabras es difícil, estas ayudan, por ello existen cantidades de libros acerca del tema, pero se requiere otra maquinaria que es la divulgación de ese material o la automotivación que lleve al individuo a querer investigar por su cuenta.

El ejemplo es fundamental. He conocido personas que hablan mucho, siempre tienen una recomendación para todo pero en la práctica hacen lo contrario, como el manido ejemplo de aquel que prohíbe fumar con un cigarrillo entre los dedos.

Las personas siempre queremos saber cómo le va a quien hace las cosas de una u otra manera, aunque se diga que nadie escarmienta en cabeza ajena, las experiencias de los otros siempre suelen nutrir nuestro conocimiento.

La publicación de @yadimelgar nos plantea las siguientes preguntas:

¿Están sus acciones respaldando tu liderazgo? , ¿es más fuerte tu graznido o tu forma de vuelo?

Dos interrogantes que requieren amplia reflexión; visto el liderazgo como una actitud hacia la mejor toma de decisiones para obtener un logro, pienso que utilizo graznido y vuelo de manera equilibrada, no es uno mayor que el otro, sino que ambos van de la mano, en relación a lo que deseo tener.

El valor de mi «graznido»

Amo las palabras y el poder que ellas tienen para el cambio de actitud de las personas que están en nuestro entorno: hogareño o profesional; convencida de que nadie puede cambiar a otro a conveniencia, sí es posible interactuar con ellos y aprender de su punto de vista, en esa interacción podemos conocer el porqué de un determinado comportamiento que está interfiriendo con lo que se desea obtener.

Hay situaciones donde se debe intervenir de inmediato y abordarlas con buena disposición y una conversación armoniosa puede arrojar elementos para mejorar nosotros mismos en nuestro liderazgo.
Valoro mucho lo que obtengo en esos casos, el crecimiento personal es necesario y se obtiene mucha información que puede ser utilizada en otras situaciones.

Proceder con el ejemplo

Generalmente sabemos de nuestra influencia cuando ha transcurrido bastante tiempo, es muy gratificante escuchar a un nieto, por ejemplo, decir: «yo quiero pintar como mi abuela»; o a una hija: «quiero que tal plato quede como tú lo hacías»; una amiga: «hice como tú haces y me funcionó». Son muchas las oportunidades de ver cómo ejercimos una influencia determinante en algún aspecto de nuestra vida, pero también como nosotros obtenemos experiencias de los ejemplos que vemos a nuestro alrededor. Eso muestra que la manera como nos desempeñamos en el día a día es tomada en cuenta.

La vida está llena de líderes, que manejan exitosamente otros eventos donde nosotros no tenemos mayor competencia. Cada uno se ubica donde tiene fortalezas eso hará que su huella sea la correcta. Cada espacio que ocupamos tiene sus propias enseñanzas, estará en nosotros aportar nuestras mejores intenciones para que todo marche de la mejor manera posible.

Mi contenido es original
Invito a @lilianajimenez

English version

Pretending to build leadership through words is difficult, they help, that is why there are many books on the subject, but another machinery is required, which is the dissemination of that material or the self-motivation that leads the individual to want to investigate on their own. .

The example is essential. I have met people who talk a lot, they always have a recommendation for everything but in practice they do the opposite, like the hackneyed example of someone who prohibits smoking with a cigarette between their fingers.

People always want to know how someone who does things in one way or another is doing, although it is said that no one teaches someone else a lesson, the experiences of others always tend to nurture our knowledge.

The post by @yadimelgar asks us the following questions:

Are their actions supporting your leadership? , is your squawk louder or your way of flying?

Two questions that require extensive reflection; seen leadership as an attitude towards the best decision making to obtain an achievement, I think that I use squawk and fly in a balanced way, one is not greater than the other, but both go hand in hand, in relation to what I want to have .

The value of my “squawk”

I love words and the power they have to change the attitude of people who are in our environment: home or professional; Convinced that no one can change another for convenience, it is possible to interact with them and learn from their point of view, in that interaction we can know the reason for a certain behavior that is interfering with what we want to obtain.

There are situations where you must intervene immediately and approach them with a good disposition, and a harmonious conversation can throw elements to improve ourselves in our leadership.
I really value what I get in those cases, personal growth is necessary and a lot of information is obtained that can be used in other situations.

Proceed with the example

Generally we know of our influence after a long time has passed, it is very gratifying to hear a grandson, for example, say: «I want to paint like my grandmother»; or to a daughter: "I want that dish to be like you did"; a friend: «I did as you do and it worked for me». There are many opportunities to see how we exert a determining influence in some aspect of our lives, but also how we obtain experiences from the examples we see around us. This shows that the way we perform on a day-to-day basis is taken into account.

Life is full of leaders, who successfully manage other events where we don't have much competition. Each one is located where he has strengths that will make his footprint the right one. Each space we occupy has its own teachings, it will be up to us to contribute our best intentions so that everything goes in the best possible way.