"Antes de la sorpresa llegó el malestar" [Eng-Esp]
En nuestro día a día, existen momentos en los que de manera inconsciente o no, sentimos un deseo espontáneo por algo, una especie de capricho que queremos cubrir lo más pronto posible. A veces se trata de una actividad que nos genere cierta actividad beneficiosa, como por ejemplo algún ejercicio o deporte que queramos practicar. También puede estar relacionado con ver una buena película, leer un libro o, como es el caso del tema de esta publicación, desear comer algo tan especial como específico. Claro, una cosa es desearlo y hacer lo necesario para tenerlo, y otra muy distinta es poder disfrutar con una buena disposición de lo que quieres.
¿Cuántas veces has querido algo, y ves que con el tiempo jamás parece llegar? Eso puede ser bastante desanimador, pero otro escenario podría ser aún peor, y es cuando aquello que tanto quieres llega de manera sorpresiva e inesperada, pero no tienes el ánimo ni las fuerzas para poder disfrutarlo. Esta es mi realidad que revela un episodio más de esas experiencias que parecen llegar pero no en el momento oportuno. Quizás sea algo tan habitual y sencillo pero que en nuestro día a día nos deja una valiosa enseñanza, o como dicen por allí, gajes del oficio que hacen de nuestra vida un interesante libro con muchas páginas para contemplar.
In our daily life, there are moments in which unconsciously or not, we feel a spontaneous desire for something, a kind of whim that we want to cover as soon as possible. Sometimes it is an activity that generates a certain beneficial activity, such as an exercise or sport that we want to practice. It can also be related to watching a good movie, reading a book or, as in the case of the subject of this publication, wanting to eat something as special as specific. Of course, it is one thing to desire it and do what is necessary to have it, and quite another to be able to enjoy what you want with a good disposition.
How many times have you wanted something, and you see that over time it never seems to come? That can be quite discouraging, but another scenario could be even worse, and that is when what you want so much arrives surprisingly and unexpectedly, but you don't have the courage or the strength to enjoy it. This is my reality that reveals one more episode of those experiences that seem to arrive but not at the right time. Perhaps it is something so common and simple but that in our day to day life leaves us a valuable lesson, or as they say over there, tricks of the trade that make our life an interesting book with many pages to contemplate.
Resulta que hace unos días salí con una amiga a trotar en la mañana, una actividad de la que disfruto mucho. Después de unos 30 minutos, decidimos caminar para dosificar y continuar, tiempo en el que aprovechamos para conversar de ciertas cosas. De pronto, caímos en el tema de las bebidas y la comida favorita de cada uno, y a modo de broma le dije que yo con un sándwich de jamón y queso soy el hombre más feliz del mundo. Ella no solo lo tomó con mucho humor sino que entre sus ocurrencias me dijo que en algún momento quizás me invitaría a probar uno preparado por ella misma. Obviamente le correspondí a su invitación, pero pensé que solo se trataba de una simple broma.
Al final de aquel día quedamos en ir nuevamente a correr, pero justo ese día amanecí con un malestar de gripe bastante fuerte, esos de que te dejan sin ánimo ni fuerzas para nada. En la insistencia de mi amiga por querer acompañarla traté de levantarme, pero no pude. Me quedé todo el día en casa tomando algunos medicamentos y descansando en mi habitación. Justo en la tarde, mi amiga me escribió para saber cómo yo estaba, y aunque si me sentía un poco mejor, igual necesitaba seguir reposando. De manera extraña mi amiga insistió en pasar por mi casa, ya que según ella necesitaba darme algo, pero le dije que no era lo más recomendable porque no me sentía bien y tampoco quería contagiarla con mi malestar, pero más pudo su perseverancia y aún sin verme decidió dejarme algo con una de mis primas.
It turns out that a few days ago I went out with a friend for a morning jog, an activity that I enjoy very much. After about 30 minutes, we decided to walk to dose and continue, time in which we took the opportunity to talk about certain things. Suddenly, we fell into the topic of drinks and each other's favorite food, and as a joke I told her that I am the happiest man in the world with a ham and cheese sandwich. She not only took it with a lot of humor but among her witticisms she told me that at some point maybe she would invite me to try one prepared by herself. Obviously I reciprocated her invitation, but I thought it was just a simple joke.
At the end of that day we agreed to go running again, but just that day I woke up with a pretty bad flu feeling, those that leave you with no courage or strength for anything. At the insistence of my friend for wanting to accompany her, I tried to get up, but I couldn't. I stayed at home all day. I stayed at home all day taking some medicine and resting in my room. Just in the afternoon, my friend wrote me to see how I was doing, and although I was feeling a little better, I still needed to continue resting. In a strange way my friend insisted on coming by my house, since according to her she needed to give me something, but I told her that it was not the most advisable thing to do because I was not feeling well and I did not want to infect her with my discomfort, but her perseverance was stronger and even without seeing me she decided to leave me something with one of my cousins.
Mi amiga me había preparado ese sándwich del cual le hice mención, y por eso era su insistencia para que yo saliera ese día. Ella dice que al enterarse de mi malestar no pensó en dejarlo así o comérselo, ya que según ella yo no tendría ánimos para comer o cocinar, y tenía razón. Ese día ni la sopa me podía comer, pues el malestar solo me dió ganas de dormir. Aún así ella no desistió, y luego de mandármelo me dijo por un mensaje que me lo comiera como si fuera un alimento antigripal 😂😂. ¿Creo que ella no está del todo cuerda, verdad? Pero lo cierto es que en medio de todo aquello, la sorpresa y la alegría por semejante detalle me hizo sentir muy bien.
Es aquí donde empecé a pensar en lo que escribí al principio, y es eso que llega en el momento menos apropiado. Pienso que la mejor manera de corresponder a la acción de mi amiga era precisamente disfrutar del sándwich que ella preparó, pero no sentía el mismo apetito como cuando hablé con ella aquella mañana. Hasta me sentí un poco culpable, porque de no haberme enfermado la situación habría sido más especial, ya que yo no tenía la más remota idea de que ella se iba a aparecer con el sándwich que surgió de una simple conversación. Pero como dicen por allí, de los pequeños detalles se escriben grandes momentos, y sé que aquello lo habría sido de forma especial.
My friend had made me that sandwich I mentioned, and that is why she insisted that I go out that day. She says that when she found out about my discomfort she didn't think about leaving it like that or eating it, since according to her I wouldn't feel like eating or cooking, and she was right. That day I couldn't even eat the soup, because the discomfort only made me want to sleep. Even so, she did not give up, and after sending it to me she told me in a message to eat it as if it were an anti-flu food 😂😂. I guess she is not quite sane, right? But the truth is that in the midst of all that, the surprise and joy for such a detail made me feel really good.
It is here that I started to think about what I wrote at the beginning, and it is that which comes at the least appropriate moment. I think that the best way to reciprocate my friend's action was precisely to enjoy the sandwich she prepared, but I didn't feel the same appetite as when I talked to her that morning. I even felt a little guilty, because if I hadn't gotten sick the situation would have been more special, since I had no idea that she was going to show up with the sandwich that came from a simple conversation. But as they say, great moments are written in small details, and I know that would have been special.
Esta anécdota con mi amiga luego me animó a pensar en sobre cuántos momentos de nuestra vida llegan a ser truncados por algún obstáculo, situación o malestar que sencillamente nos privan de poder disfrutarlo. Por supuesto que en algún momento nos sentiremos limitados por alguna enfermedad, pero sacando de la ecuación lo último mencionado, ¿Cuántas experiencias se podrían contar en nuestra vida? Algunos amigos hasta me llegaron a decir que le rompí el corazón a mi amiga por no ir con ella a correr un rato, pero les confieso con total honestidad que aquel día hasta para caminar unos cuantos metros de mi casa era un total calvario, de esos malestares que se sufren hasta en el músculo más pequeño de nuestro cuerpo.
Ya el malestar pasó, y aunque el sándwich me lo pude comer al siguiente día, la sensación de una nueva cita matutina me genera cierta expectativa. Quizás responder con la misma moneda a mi amiga no es una idea del todo descabellada, y más cuando en aquella conversación reveló que amaba las cocadas. Sea lo que sea, espero que esta vez la sorpresa no se arruiné con otro pesado malestar 🙈😃
This anecdote with my friend then encouraged me to think about how many moments in our lives are truncated by some obstacle, situation or discomfort that simply deprives us of being able to enjoy them. Of course, at some point we will feel limited by some illness, but taking the last mentioned out of the equation, how many experiences could be counted in our life? Some friends even told me that I broke my friend's heart for not going running with her for a while, but I confess with total honesty that that day even to walk a few meters from my house was a total ordeal, one of those discomforts that we suffer even in the smallest muscle of our body.
Now the discomfort has passed, and although I was able to eat the sandwich the next day, the feeling of a new morning appointment generates certain expectations in me. Perhaps responding with the same coin to my friend is not an entirely unreasonable idea, especially when she revealed in that conversation that she loved cocadas. Whatever it is, I hope that this time the surprise won't be ruined with another heavy discomfort 🙈😃
*La segunda y tercera imagen fueron tomadas con mi teléfono Umidigi A9 pro y son de mi propiedad.
*The second and third images were taken with my Umidigi A9 pro phone and are my own.
Gracias por darle valor a esta publicación con tu tiempo y atención.
Hasta pronto.
Thank you for giving value to this publication with your time and attention.
See you soon.
From Venezuela, our witness drives decentralization and the adoption of Web3 technology, creating opportunities for the local community and contributing to the global ecosystem. // Desde Venezuela, nuestro testigo impulsa la descentralización y la adopción de la tecnología Web3, generando oportunidades para la comunidad local y contribuyendo al ecosistema global.
Sigue, contacta y se parte del testigo en: // Follow, contact and be part of the witness in:
Hay experiencias que son como un plato del día en una carta exclusiva es una oportunidad y a veces simplemente debemos hacer lo imposible para vivirlo.
Que bonito gesto el de tu amiga.
Un abrazo
Ciertamente hay momentos en la vida que se dibujan así, pero en ocasiones tocan esas sensaciones agridulces que escapan de nuestra disposición 🙈
Muchas gracias amiga @getheenspring por sumar tu comentario a esta experiencia 🙂 Saludos 👋
@cajiro, I paid out 0.851 HIVE and 0.158 HBD to reward 1 comments in this discussion thread.