Crónicas de lo cotidiano 118: "Encuentra tu tiempo, tu ritmo", por bonzopoe

avatar

image.png
Fuente

Como comenté en un post anterior, estuve casi dos semanas sin internet, y esto trastornó todas mis rutinas y muchos aspectos de mi vida. Suena dramático, lo sé, en la realidad no lo fue tanto, pero si fue complicado de enfrentar, y no es hasta ahora, varios días después de tener internet de nuevo, que finalmente siento que vuelvo a la normalidad.

¿Por qué es esto? Pues porque ha implicado un ajuste, y es hasta ahora que me siento cómodo de nuevo. Es como cuando dejas de ir un tiempo al gimnasio, y cuando regresas te duele todo, y lleva unos días hasta que te sientes cómodo de nuevo y recuperas el disfrute de hacer ejercicio.

Durante estos días el desgaste fue más emocional que físico. El tema no fue el cansancio físico de tener que hacer de repente todo lo que no pude hacer en dos semanas, sino el decidir en que momento, y a que ritmo hacerlo, para que ello no se volviera algo desagradable. Y es que hasta lo que más amamos, cuando se hace a la fuerza y en exceso, no se disfruta.

image.png
Fuente

La presión natural era sacar todos los pendiente lo más pronto posible, pero yo no estaba dispuesto a sumar a dos semanas de incomodidades, otra más para ponerme al día, y luego otra para recuperarme de todo ello. Así que he estado estos días dosificando y tratando de encontrar el ritmo adecuado para ponerme al día sin que ello se vuelva algo pesado. Me llevará más tiempo, pero lo prefiero así.

Esto me ha llevado a reflexionar sobre los ritmos y diferentes velocidades que tenemos todos. Hay gente que es muy calmosa, y pareciera que son incapaces de hacer las cosas rápido, mi padre es uno de ellos. Y del otro lado hay gente que hace todo de prisa, y pareciera que no conocen otra velocidad para operar. En nuestro mundo actual se aprecia más a las segundas, lo que es otro tema de discusión, pero no todos somos así, ni tenemos que ser así.

Luchar por encontrar nuestro ritmo natural debería ser algo a perseguir, pero no lo hacemos, y "bailamos" al ritmo que nos ponen los demás o nuestro entorno, y esto puede hacernos la vida miserable y hasta enfermarnos. Saber cual es nuestro ritmo natural pude facilitarnos la vida en muchísimas cosas, pero o no somos conscientes de ello, o no nos importa.

image.png
Fuente

Es cierto que hay quienes no pueden darse el lujo de elegir. Si tienes hijos sabes que el ritmo muchas veces lo imponen ellos y sus necesidades, y no tú, pero aún en esos casos, encontrar momentos, por pequeños que sean, en que puedas ir a tu propio ritmo, te hará bien.

Como docente en la disciplina de la arquitectura sé que no todos tenemos un mismo ritmo. Hay alumnos que inician muy rápido un diseño, y luego se toman tiempo resolviendo los detalles. Hay los que parece que dan vueltas en círculo, y aparentemente no avanzan, pero al final cuajan todo de golpe, y surge el proyecto, y hay los que mantienen un ritmo constante de principio a fin.

Reconocer esos tiempos de cada alumno es clave para poder acompañarlos en su proceso, y no puedes tratarlos a todo igual. A algunos hay que presionarlos para que trabajen bien. A otros hay que frenarlos porque van como caballos desbocados. Y de otros simplemente hay que estar pendientes y acompañarlos en su proceso.

image.png
Fuente

Como dice el refrán: "Cada cabeza es un mundo", y para poder apoyar a esa cabezas hay que entenderlas, o al menos saber a cuantas revoluciones por minuto operan, para a partir de ahí poder sumar a sus procesos únicos e individuales. Eso es lo más pesado de ser un asesor de proyectos para arquitectos en formación, pero también lo más satisfactorio.

Yo en cierto momento me di cuenta de que también tengo un ritmo, y para estar bien, para sentirme pleno, necesito respetarlo y tratar de apegarme a el lo más posible. No siempre es fácil y no siempre le atino, y situaciones como esta reciente, en que se me trastornó la existencia por no contar con algo que es esencial para mi, como es el acceso a internet, me obligan a veces a esforzarme más de lo habitual para lograrlo.

En esta ocasión ahí la llevo, poco a poco poniéndome al día de la manera más indolora y sana posible que puedo, y se que este tema es uno que pareciera ocioso para muchos, pero para mi es importante. Es una de esas muchas cosas en que no reparamos y nos afectan más de lo que imaginamos. Si tu nunca has reflexionado al respecto, te invito a hacerlo. Tal vez te des cuenta de que con unos pequeños ajustes puedes mejorar mucho tu calidad de vida y puedes hasta ser más feliz. Muchas gracias por leerme y hasta la próxima.




©bonzopoe, 2024.

Sin-título-1.gif


imagen.png

Si llegaste hasta acá muchas gracias por leer este publicación y dedicarme un momento de tu tiempo. Hasta la próxima y recuerda que se vale dejar comentarios.


imagen.png



0
0
0.000
8 comments
avatar

¡Felicitaciones!


Has sido votado por @entropia

Estás participando para optar a la mención especial que se efectuará el domingo 21 de julio del 2024 a las 8:00 pm (hora de Venezuela), gracias a la cual el autor del artículo seleccionado recibirá la cantidad de 1 HIVE transferida a su cuenta.

¡También has recibido 1 ENTROKEN! El token del PROYECTO ENTROPÍA impulsado por la plataforma Steem-Engine.


1. Invierte en el PROYECTO ENTROPÍA y recibe ganancias semanalmente. Entra aquí para más información.

2. Contáctanos en Discord: https://discord.gg/hkCjFeb

3. Suscríbete a nuestra COMUNIDAD y apoya al trail de @Entropia y así podrás ganar recompensas de curación de forma automática. Entra aquí para más información sobre nuestro trail.

4. Visita nuestro canal de Youtube.

Atentamente

El equipo de curación del PROYECTO ENTROPÍA

0
0
0.000
avatar

Cuesta, ¿verdad?, reconocer que todos tenemos un tiempo.
Qué publicación, parece una amena charla con un buen amigo.
Gracias, @bonzopoe

0
0
0.000
avatar

Pues si cuesta, pero es necesario, o al menos así lo veo yo. Muchas gracias por tu comentario, siempre es un gusto verte por acá. ¡Saludos!

0
0
0.000