Desde que salí de la zona de confort que me brindaba mi hogar materno, y construí el mío propio, dos cosas seguían siendo fundamentales a lo largo del año en cuanto a celebraciones se trataba; lo primero, que un cumpleaños jamás pasaría por debajo de la mesa, como decían popularmente, y lo segundo, que la navidad se disfrutaría de principio a fin con todos sus segundos, sus detalles y sus costumbres.

Mi primera casa estando casada, era sencillita y pequeña, con pocos muebles, en ella vivíamos mi esposo, mi hijo recién nacido, y yo, y no podía faltar el arbolito navideño aquel primer diciembre que pasamos en ella, entonces yo instituí desde ese momento que adornaría mi casa desde el día 1 de ese mes. No voy a negar que por alguna situación inesperada me he atrasado unos días algunos años, o que otros me ha abrazado más la navidad y he comenzado a adornar la última semana de noviembre… es natural que esas cosas pasen.

Mi reflexión de hoy está basada en la fecha en la que comenzamos a celebrar la navidad, cuándo empezamos a decorar y adornar nuestras casas, en qué momento compramos todo lo que necesitamos para los días navideños, y cuándo ponemos gaitas, aguinaldos, y preparamos hallacas y postres navideños.

Si por mí fuera, todo el año sería navidad, jajaja, pero cada cosa en su momento como lo dictan las tradiciones, así debe ser. Lo que si no considero que tiene una fecha definida, es el momento de hacer compras, preparar comidas típicas navideñas, decorar, adornar, escuchar música tradicional, y arroparnos de la navidad. A medida que el mes de diciembre se acerca, no sólo nos llenamos de alegría a pesar de cualquier crisis que estemos atravesando, sino que se va convirtiendo en una temporada comercial, y las calles y comercios se visten de esta fecha tan especial.

Más allá de la comercialización de la temporada navideña, nuestros corazones se alegran por ser una época llena de magia, donde la fe crece aún más porque celebramos la llegada del Niño Dios y eso nos hace sentir que cada deseo se cumplirá, que menos gente sufrirá en el mundo, y que el espíritu navideño llegará a cada rincón del planeta para traer paz y salud… ésa será siempre nuestra consigna de fe y esperanza.

Por eso pienso que la navidad habita en el corazón de cada quien, y más allá de que alguien estipule la fecha de comenzar a celebrarla, es nuestro espíritu quien manda, y nuestra mente quien decide cómo y cuándo empezar a disfrutar la temporada navideña.

La mía nunca ha terminado, he comido dulce de lechosa todo el año, he comido hallacas desde el 1° de enero con pausas intermedias y retomándolas hace un par de meses, mis adornos estuvieron puestos hasta febrero, jajajaja, casi los dejo así para esta navidad, y lo más sabroso aún, veo películas navideñas y escucho gaitas todo el año porque amo la gaita y me llena de alegría hasta el alma.

He visto en las redes sociales criticar la apertura navideña casi a mediados del año, y hasta muchos vecinos y conocidos que piensan igual. Así que mi reflexión va dirigida a todos los que cuestionan que se inicie la navidad antes de diciembre porque sólo en diciembre es navidad… no señor, navidad es el día 25 de diciembre, y la época navideña en nuestros corazones es toda la vida, así que oficialicen su temporada navideña cuando quieran, o cuando sus corazones se lo indiquen. ¡Y bienvenida la navidad!

Since I left the comfort zone provided by my mother's home and built my own, two things remained fundamental throughout the year as far as celebrations were concerned; first, that a birthday would never pass under the table, as they used to say, and second, that Christmas would be enjoyed from beginning to end with all its seconds, its details and its customs.

My first house when I was married, was simple and small, with little furniture, in it lived my husband, my newborn son, and me, and I could not miss the Christmas tree that first December that we spent in it, then I instituted from that moment that I would decorate my house from the 1st of that month. I will not deny that for some unexpected situation I have been a few days late some years, or that others I have embraced Christmas more and I have begun to decorate the last week of November ... it is natural that these things happen.

My reflection today is based on when we start celebrating Christmas, when we start decorating and decorating our houses, when we buy everything we need for the Christmas days, and when we put out bagpipes, aguinaldos, and prepare hallacas and Christmas desserts.

If it were up to me, the whole year would be Christmas, hahaha, but everything in its own time as traditions dictate, that's the way it should be. What I do not consider to have a definite date, is the time to shop, prepare typical Christmas meals, decorate, decorate, listen to traditional music, and wrap ourselves in Christmas.As the month of December approaches, not only do we fill ourselves with joy despite whatever crisis we are going through, but it also becomes a commercial season, and the streets and stores dress up for this special date.

Beyond the commercialization of the Christmas season, our hearts rejoice because it is a time full of magic, where faith grows even more because we celebrate the arrival of the Child God and that makes us feel that every wish will be fulfilled, that less people will suffer in the world, and that the Christmas spirit will reach every corner of the planet to bring peace and health... that will always be our motto of faith and hope.

That is why I think that Christmas dwells in the heart of each one of us, and beyond the fact that someone stipulates the date to start celebrating it, it is our spirit who rules, and our mind who decides how and when to start enjoying the Christmas season.

Mine has never ended, I have eaten dulce de lechosa all year long, I have eaten hallacas since January 1st with pauses in between and resuming them a couple of months ago, my decorations were up until February, hahahaha, I almost left them that way for this Christmas, and the tastiest thing yet, I watch Christmas movies and listen to gaitas all year long because I love the gaita and it fills me with joy to my soul.

I have seen in social networks criticize the Christmas opening almost in the middle of the year, and even many neighbors and acquaintances who think the same.So my reflection is directed to all those who question the beginning of Christmas before December because only in December is Christmas ... no sir, Christmas is on December 25, and the Christmas season in our hearts is all life, so make your Christmas season official when you want, or when your hearts tell you to. And welcome Christmas!

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