¿El Renacer de Yusuke? | Yu Yu Hakusho Live Action

Cuando Netflix anuncia la adaptación live action de un anime, toda la comunidad otaku tiembla. A pesar de lo bien recibida que fue la adaptación de One Piece, aún no podemos olvidar el desastre que fue la pseudo-adaptación de Death Note, y ni mencionar la de Cowboy Bebop. Por lo tanto, cuando vi el anuncio del live action de Yu Yu Hakusho, sinceramente, no sabía qué esperar. Muchos aspectos de los avances me parecieron cuestionables; sin embargo, decidí darle el beneficio de la duda y terminé con sentimientos encontrados respecto a la serie, aunque no me arrepiento de haberla visto.

Yu Yu Hakusho narra la historia de Yusuke Urameshi, un adolescente de reputación dudosa que muere al salvar a un niño. Tras su fallecimiento, se le otorga la oportunidad de regresar a la vida como detective espiritual, un encargado de mantener el equilibrio entre el mundo humano y espiritual. Este trabajo lo lleva a enfrentarse a criaturas sobrenaturales para proteger la Tierra, al mismo tiempo que descubre nuevas amistades y desarrolla poderes que le serán útiles en su labor.

Esta adaptación consta de cinco episodios, cada uno con una duración aproximada de 48 minutos, y está basada "libremente" en los primeros arcos de la serie, llegando hasta el enfrentamiento final con los hermanos Toguro. En general, mi impresión fue positiva; es una serie entretenida que intenta abarcar los puntos más importantes de esos arcos del anime/manga original. Sin embargo, siento que la producción tomó una decisión bastante cuestionable al intentar condensar tanta historia en solo cinco episodios. Esto provocó que todo se sintiera demasiado apresurado, con omisiones significativas en la historia, y una extraña mezcla de todos los acontecimientos del torneo en el que se enfrentan a los hermanos Toguro.

Lo que me gustó

Sin duda, mi aspecto favorito de esta adaptación fueron las peleas. No estoy segura si fue porque mis expectativas estaban bajas, pero sinceramente las encontré bastante buenas. Fueron vistosas, emocionantes y estuvieron bien coreografiadas, algunas partes incluso parecían un homenaje a las películas clásicas de artes marciales. Me sorprendió ver la verdadera forma de Kurama y los poderes especiales de cada personaje principal tan rápidamente. Sin embargo, teniendo en cuenta la parte de la historia que abarca, estoy contenta de que no hayan dejado de lado estos elementos por cuestiones de presupuesto. Definitivamente, las peleas fueron el aspecto que más disfruté de la adaptación, incluso las de personajes menos trascendentales, como los primeros con los que se enfrenta Yusuke, me parecieron interesantes.

Otro aspecto que me agradó fueron los personajes. Aunque hubo algunas elecciones cuestionables, en su mayoría considero que fueron bien representados. Las limitaciones que observé probablemente se debieron al presupuesto reducido de la serie. Hubo un intento claro de mantener la esencia de los personajes tanto en la caracterización como en la actuación del elenco, y aunque no se logró completamente para todos, en su mayoría creo que cumplieron con el cometido. Quiero hacer una mención especial en este punto para Genkai, quien simplemente me fascinó, aunque me hubiera gustado verla más tiempo en pantalla.

Un detalle que me encantó que incluyeran fue la breve aparición de un fragmento del opening de la serie de anime como parte de la música que escuchaba un personaje secundario en una radio. Fue un guiño para todos los fanáticos de la serie clásica que me hizo recordar lo genial que es esa canción.

Lo que no me gustó

Lo peor para mí fue definitivamente el intento de condensar tantos episodios en menos de 5 horas. Como ya mencioné, hubo mucho que se quedó sin contar y demasiadas peleas por mostrar. Todo esto hizo que los personajes tuvieran poco desarrollo y que la relación de camaradería entre los principales no se estableciera correctamente. El torneo donde enfrentan a los hermanos Toguro cambió por completo y, aunque se mostraron las peleas contra el equipo Toguro, todo quedó ahí, lo cual es una lástima porque había muchas más cosas interesantes además de lo ya mencionado.

Podría mencionar también la falta de calidad en algunos vestuarios o pelucas (la de Shuichi, por favor), pero creo que eso fue simplemente falta de presupuesto. Incluso creo que la cantidad tan reducida de episodios se debió a lo mismo, lo cual es una verdadera pena, porque las intenciones de hacer un producto que agradara a los fans y le hiciera honor al anime estaban presentes; simplemente no hubo suficiente presupuesto para llevar todas las ideas a cabo.

A pesar de sus deficiencias, la serie me pareció entretenida. No puedo afirmar que cumplió con todas mis expectativas, pero la considero una introducción adecuada al mundo de Yu Yu Hakusho, especialmente para aquellos que no han visto la serie original. Para quienes la vimos de niños, es simplemente un viaje a la nostalgia bastante agradable. Así que, sea cual sea su caso, vale la pena darle una oportunidad a este live action.