Una Conexión que Trasciende el Tiempo | Your Name

Jamás debemos juzgar un libro por su portada. Eso es algo que se ha escuchado mucho y aunque normalmente es cierto, hay algo dentro de nosotros que siempre nos empuja a rechazar algo sin saber nada de él. En el caso de los animes y en cuestiones de entretenimiento en general, yo tengo muy claro que el romance no es lo mío, hay muy pocas cosas de ese estilo que me gustan, así que cuando salió la película Your Name, simplemente la pasé de largo suponiendo que era una de las tantas cursilerías que me aburren. Sin embargo, hace poco leí una reseña de ella en la comunidad y quedé intrigada, eso se tradujo en ganas de verla, lo cual sucedió justamente el pasado fin de semana y debo decir que aunque si tiene su buena carga de romance, la trama me mantuvo a la expectativa y me entretuvo más de lo que esperaba.

La historia trata sobre dos adolescentes, Mitsuha y Taki, quienes intercambian misteriosamente sus cuerpos mientras duermen. Como es de esperarse, al principio todo es confuso para ellos y cometen errores en la vida del otro que deberán aprender a evitar. El problema es que cada vez que despiertan en sus cuerpos los recuerdos de la vida del otro van desapareciendo poco a poco, como si todo hubiera sido simplemente un sueño. Después de muchos intentos fallidos, finalmente descubren una forma efectiva para comunicarse y ayudarse mutuamente en sus vidas diarias.

Sin embargo, cuando todo parece estar marchando bien entre ellos, de un momento a otro los cambios paran debido a un evento catastrófico, por lo que deben buscar la manera de reencontrarse y unir fuerzas para superar una gran tragedia. A pesar de no recordar sus nombres, los dos lucharán por encontrar una conexión especial entre ellos que trascienda el tiempo y el espacio.

Your Name es una película que definitivamente me sorprendió, vamos, yo sabía que era buena porque tiene una crítica muy positiva, sin embargo, yo me esperaba un simple romance adolescente y no todo lo que pasa en la historia. Hay un juego de paralelismos geniales entre la vida de un chico de una ciudad tan grande y tan ajetreada como Tokio, y la de una chica de un pueblo pequeño y muy tradicionalista. Estos dos polos tan opuestos están perfectamente representados en la película por Mitsuha y Taki, a través de quienes aprendemos un poco más sobre la cultura y el día a día que se vive en ese país. En la tremenda travesía que atraviesan los personajes con cada cambio de cuerpo los vemos madurar, empatizar y sobre todo aprender a valorar lo que se tiene y a respetar lo de los demás.

Justamente cuando pensaba que la historia se había estancado y estaba a punto de perderme dentro de un mar de amor adolescente, todo cambia y se revela algo que afecta rotundamente la relación existente entre los personajes. Este giro cambió completamente la percepción que tenía de la película y salvó la trama de ser solo una historia de amor adolescente. Se incluyeron elementos de fantasía como saltos temporales y líneas de tiempo, los cuales enriquecieron la historia y prepararon todo para un caótico, pero entretenido segundo acto, en el cual vemos a los protagonistas luchar contra el tiempo y la pérdida de memoria para lograr alcanzarse el uno al otro.

El emotivo desenlace es simplemente lo que se espera de una historia de este tipo y debo decir que me decepcionó un poco. Me hubiera gustado un final bueno para ambos, pero no completamente feliz como el que presentaron. Pero bueno, supongo que dentro de toda la fantasía de la película, una casualidad más, no hace daño. Además, debo aceptar que fue un desenlace satisfactorio, a pesar de lo cursi de todo el asunto.

ANIMACIÓN Y MÚSICA

No reconocer la belleza de arte visual que tiene esta película sería un error tremendo. El diseño de los personajes es muy bonito, lo que más me gustó de esto es que los animadores no cayeron en el error de crear a los típicos personajes genéricamente atractivos que podemos ver en cualquier Slice of life romántico, lo cual me pareció fantástico. De igual manera, los paisajes, tanto los rurales, como los urbanos, están perfectamente realizados y representan, de manera hermosa, ambas caras de Japón.

En cuanto a la música tuve sentimientos encontrados, hubo momentos en los que la sentí maravillosa, como si fuera el acompañamiento perfecto para la trama. Sin embargo, hubo algunas otras situaciones en las que la música me estorbaba, esto fue debido a que las canciones tenían voz, lo cual me sacaba por completo del ambiente que había generado la historia, ya que en algunas partes había un personaje hablando al mismo tiempo. Fue algo lamentable porque sucedió en momentos importantes en los que quizás otro tipo de intervención musical hubiera sido más adecuada.

A pesar de las pocas cosas que me pudieron desagradar de ella, en realidad es una gran película, con una trama bien desarrollada, al igual que sus personajes, que logró conmoverme en más de una vez. Quizás no es la mejor de animación japonesa que he visto, sin embargo, tiene un buen lugar en mi lista de favoritos, así que si no la han visto, no duden en hacerlo, probablemente los sorprenda, como lo hizo conmigo.